Luis Pesántez, debut de un cantante lírico en UPS

El caminar por la música lo llevó a lo clásico. Desde lo familiar a los coros y al canto académico, un artista que se forja con el tiempo. Luis Mario Pesántez Tello es un cantante lírico cuencano, tiene 42 años y la noche del miércoles debutó como barítomo en un recital que ofreció en el teatro Carlos Crespi de la Universidad Politécnica Salesiana, donde cantó cinco series de canciones, en cinco idiomas.

El barítono, en su primera actuación, fue acompañado al piano por al piano por Steven Mendoza. Cortesía

El caminar por la música lo llevó a lo clásico. Desde lo familiar a los coros y al canto académico, un artista que se forja con el tiempo.

Luis Mario Pesántez Tello es un cantante lírico cuencano, tiene 42 años y la noche del miércoles debutó como barítomo en un recital que ofreció en el teatro Carlos Crespi de la Universidad Politécnica Salesiana, donde cantó cinco series de canciones, en cinco idiomas.

El artista cursa sus licenciatura de estudios musicales en la Universidad de Winsconsin, en Estados Unidos y le falta un año para recibirse como docente de música con mención en Dirección Coral. Aunque inició su formación académico musical hace pocos años, su incursión en el arte viene de la niñez.

Empezó a cantar en reuniones familiares, en la escuela, después en coros, en el del conservatorio José María Rodríguez, en el de la universidad y con el grupo “Temporal”. “Al canto le debo todo, gracias al canto pude pagar mis estudios del colegio y universidad; gracias al canto conocí a mi esposa y continuamos”, señala Pesántez, cantante de vocación.

Sin embargo, por necesidades vitales y de subsistencia debió seguir otra carrera: Ingeniería Mecánica, en la Politécnica Salesiana. Quiso seguir Música, pero le rechazaron en la Universidad de Cuenca y la objeción fue la edad.

Emigrado a Estados Unidos, fue aceptado en la institución de educación superior Madison Technical College, de la ciudad donde reside, donde emprendió los estudios de la música en forma técnica, pues antes su gusto por cantar era vocación. Aun así, estuvo en obras musicales grupales como “Jesucristo Superstar”, “Cats”, “Hermano Sol, Hermana Luna”, “José y su túnica multicolor”.

Ahora integra el coro de la Madison Technical College, ha participado en su coro, en el UWW Chamber Singers, con el que ha participado en presentaciones en Polonia y Alemania, donde recibió clases maestras en el conservatorio de la ciudad de Frakfurt.

Condiciones y personalidad se notan en un músico, en su caso, quizás se vean un poco distintas a sus compañeros pues muchos empezaron en la música académica en la niñez. Sin embargo, se dispone a enfrentar el reto de actuar.

Y así fue su debut. Acompañado al piano por Steven Mendoza, estudiante del séptimo ciclo de la Facultad de Artes de la Universidad de Cuenca, interpretó un primer set de canciones, en alemán, del compositor de esa nacionalidad Robert Shuman, la mayoría románticas.

El segundo bloque de canciones, románticas y dramáticas, fueron en italiano, de Antonio Caldara y un autor desconocido; a continuación siguió con piezas de zarzuela, la ópera española, de autores como José Serrano y Ruperto Chapí, los temas aludían al amor de un padre por su hija moribunda, el patriotismo y la intensidad dramática de una tempestad. (AVB)-(I)

 

Lenguas y música

Tras el intermedio, el barítono interpretó tres temas en inglés, entre ellos “Dulcinea”, de la obra “El hombre de la Mancha”, de Mitch Leight. Luego otros dos temas, esta vez en francés, de Gabriel Fauré, para cerrar el recital con “La flor de la canela”, de la peruana Chabuca Granda.

Pasar de canción a canción y de idioma a idioma, le fue posible pues parte de sus estudios musicales incluyen el Alfabeto Fonético Internacional para pronunciar varias lenguas, aunque no se las domine. Un músico profesional debe aprender esta disciplina, especialmente porque gran parte de la música lírica está escrita en lenguas como el italiano.(I)