Sueños y conciencia

Martina Pérez

De la sabiduría se entiende que el sueño es donde empieza la realidad, se crea historia y se difumina el pasado. Cada 5 de abril se recuerda que la conciencia es el único camino a la paz  y solo se lograra si se construye el perfecto ascenso de una sociedad justa y libre. La libertad del ser humano ha sido limitada por conflictos, decisiones particulares y ambiciones individuales. La paz ha sido lastimada y la vida profanada, los derechos se leen y la economía genera hambre y pobreza. Las heridas colectivas se resumen en la injusticia diaria y perenne, en los comportamientos fundamentados en la violencia y el interminable egoísmo. Para ser conscientes y generar conciencia hay que revolucionar nuestros objetivos, pensamientos y actos; el rol de la cultura de paz es primar en todas las naciones y el papel de cada ser humano es la transformación. La misión debe ser la solidaridad, el reconocimiento del pluralismo y el amor por las diferencias que nos unen. El sendero a la paz debe ser eterno, para que los niños y niñas que crecen, también avancen y diseñen una vida mejor. El día de la conciencia nos recomienda soñar, porque solo así el mundo despertará. (O)