Tras la denuncia de exfuncionarios de la Prefectura sobre la supuesta contratación de personal que tiene parentesco con el prefecto Yaku Pérez y y altos cargos de funcionarios, el Gobierno Provincial pidió un examen especial a la Contraloría sobre el caso.
El prefecto Pérez, quien se encuentra aislado por haber dado positivo a coronavirus, afirmó que no tiene “un solo familiar que esté trabajando dentro de la Prefectura o dentro de sus empresas”.
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“Las puertas están abiertas para que medios de comunicación y Contraloría, ingresen a la Prefectura del Azuay y revisen cada uno de los contratos del personal que labora en la institución, tengo la certeza de que no hemos incurrido en ningún delito, mucho menos en nepotismo”, afirmó.
El Prefecto detalló que si bien su excuñada trabaja en la dirección financiera del Gobierno Provincial, tras haber quedado viudo se rompió su vínculo familiar, estado corroborado por la Procuraduría General del Estado mediante consulta.
Pérez afirmó que tras las denuncias se “esconden” intentos por desestabilizar su gestión.
“Detrás de esta denuncia se esconden intereses políticos de quienes pretenden afectar una gestión. Con estas acciones no solo se intenta dañar al prefecto, sino a los colaboradores de la institución” afirmó. (JMM) (I)
