Deudas por alrededor de 44 millones de dólares, el rechazo a las denuncias por “supuestos” casos de nepotismo en el Gobierno Provincial y acciones contra la minería. Esos fueron los temas que abordó ayer Yaku Pérez, prefecto del Azuay, quien apareció ante los medios de comunicación, luego de 20 días de ausencia por ser diagnosticado con COVID-19, y cumplir con el aislamiento y tratamiento respectivo para superar la enfermedad.
Sobre las deudas del Gobierno Nacional, aseguró que más de 13 millones de dólares corresponden a las transferencias mensuales (alícuotas) divididas una parte de marzo y en su totalidad de abril, mayo, junio y julio.
Además, 22 millones por las acciones en las eléctricas, 750 mil dólares del Impuesto al Valor Agregado (IVA), entre otros recursos pendientes.
“Esperaremos pacientemente hasta este mes, hemos solicitado una reunión con el Presidente de la República (…) Si no tenemos la reunión y no nos cancelan, iniciaremos acciones legales, y no descartamos para el próximo mes, una asamblea provincial”, comentó.
Denuncias
En lo que respecta a las denuncias de nepotismo, aseguró que no tiene familiares trabajando en la Prefectura, incluso desmintió caso por caso. Acotó que ha pedido a la Contraloría General del Estado (CGE) que realice una auditoría por los supuestas denuncias.
En cuanto a la minería, advirtió que la empresa Inv Metals -que no puede realizar la actividad extractiva en las fuentes de agua en Girón por los resultados de la Consulta Popular- se trasladaría a Cuenca, ya que contaría con diseños para una bocamina. (BPR)-(I)
