Acuerdo de integración con Chile

EDITORIAL|

La firma del Acuerdo de Integración entre Ecuador y Chile es un paso de gran trascendencia para el desarrollo de nuestro país. En los próximos meses se anuncia, igualmente, la firma de un similar convenio con México. Cumplidos estos dos pasos queda franqueada en buena parte la incorporación del Ecuador a la Alianza del Pacífico, espacio en el que debió estar por innumerables razones desde hace mucho tiempo. En tiempos como los actuales, la integración de los países que tienen afinidad de intereses y que pueden complementarse mutuamente es fundamental de cara a un mundo en donde, pese a la globalización, los bloques regionales aseguran frentes comunes.

Como se mencionó por parte del mandatario ecuatoriano, Chile está entre los cinco principales destinos de exportaciones de nuestro país. Actualmente más de setecientas empresas ecuatorianas exportan productos a Chile por algo más de unos mil quinientos millones de dólares anuales. Con este acuerdo recibirán nuevos incentivos para producir más y exportar en mejores condiciones arancelarias. Productos como el maíz, arroz y el azúcar se verán especialmente favorecidos generando nuevos ingresos para los agricultores ecuatorianos.

Éste y los otros acuerdos que se anuncian con México, así como la integración a la Alianza del Pacífico son especialmente importantes hoy cuando la pandemia ha dado un golpe demoledor a la producción nacional y por lo tanto a las fuentes de trabajo. Se abren nuevas posibilidades de crecimiento y con ello de generación de nuevas fuentes de empleo para los cientos de miles de ecuatorianos que hoy están desocupados o tienen trabajo no adecuado. El país privilegió en el anterior gobierno alianzas intrascendentes con países con los cuales no tenemos intereses comunes y se lo hizo por razones ideológicas. Hoy se retoma el camino correcto con países hermanos con los cuales nos une una positiva tradición.