Hospital de Cuenca se expande para atender a más pacientes

Las edades de los pacientes críticos, en su mayoría, oscilan entre los 29 y 40 años, esto según los reportes de la Coordinación Zonal 6 de Salud.

El hospital Vicente Corral Moscoso ampliará sus áreas de atención a pacientes no COVID en Cuenca. Cortesía

En la última semana en Cuenca se registraron 355 nuevos casos de COVID-19, lo que representa la cifra más baja en las últimas 12 semanas.

Sin embargo, los pacientes que requieren hospitalización por otras causas fuera de la COVID no se reducen.

“Tenemos las camas UCI llenas y estamos adaptando nuevos espacios para los pacientes no COVID” comenta el gerente del hospital Vicente Corral Moscoso, Iván Feicán.

El hospital instala carpas en la zona que correspondía al parqueadero, lugar donde atenderá urgencias y enfermedades que no tengan que ver con el coronavirus, con la finalidad de liberar espacios al interior de la casa de salud.

Feicán explica que de 35 pacientes crónicos de coronavirus que reciben a diario, al menos 3 se quedan internados, un número que se va sumando y hace que los respiradores escaseen en el hospital. Los pacientes con síntomas respiratorios en el último mes rebasaron las 1.100 atenciones.

Señala también que la atención a pacientes de otro tipo de emergencias, principalmente accidentes de tránsito y lesiones, se ha duplicado.

Es por esto que se están implementando las casetas, dotadas por la ACNUR, como parte de una de las acciones programadas para el desconfinamiento.

Causas

La reducción del número de pacientes de COVID se da, según el coordinador zonal 6 de Salud, Julio Molina, por el trabajo de las brigadas que recorren las zonas de mayor conflicto y aíslan a los pacientes, con lo que se corta la cadena de contagio.

El ECU-911 reporta que las aglomeraciones se mantienen en un índice bajo en Cuenca, pero las fiestas clandestinas aún se encuentran en una media de 100 cada fin de semana, lo que conlleva un alto riesgo de contagio.

Por otro lado, hay un alto índice de reuniones sociales de jóvenes y adultos de edades comprendidas entre los 29 y 40 años, donde la ingesta de alcohol, tabaco o drogas incrementa los efectos de la enfermedad.

Feicán indicó que, mientras no exista una vacuna, la única forma de combatir el virus es usando la mascarillas, manteniendo el distanciamiento social y con la desinfección y lavado de manos.

Si no se cumplen estos protocolos, “es muy difícil” que los hospitales de Cuenca empiecen a tener camas libres, comentó. (JMM) (I)