Cuenca: Dos siglos de poesía (III)

Jorge Dávila Vázquez Rincón de Cultura

OPINIÓN |

Desde hace un tiempo, Marco Tello venía dándole vueltas a un proyecto: ampliar y ahondar su gran obra EL PATRIMONIO LÍRICO DE CUENCA.  Largos meses de revisión, reescritura, profundización en los diversos temas, dieron como resultado un libro impresionante: CUENCA: DOS SIGLOS DE POESÍA, de próxima aparición.

Como antecedentes recopilatorios y analíticos, hay algunos títulos de gran valor, por ejemplo: El Azuay Literario, de Manuel Moreno Mora; los cuatro tomos de la Antología de la Poesía cuencana, de Antonio Lloret Bastidas; Muestra de la Poesía Cuencana del Siglo XX de Efraín Jara idrovo y Antología del Grupo Elan de Eugenio Moreno Heredia. Pero ninguno de ellos bucea tanto como Tello en las características generacionales, ni en el nivel lírico individual de las distintas producciones poéticas.

El libro tiene siete partes, una Introducción y un capítulo de conclusiones. El texto es riquísimo y se complementa con casi 300 notas; exhibe una diversidad de estilos, de acuerdo con lo que enfoca cada sección. La Introducción es un ejercicio brillante de historia y literatura universal, en la última parte del siglo XIX e inicios del XX, que luego va contrayéndose a lo hispanoamericano, haciendo hincapié en los grandes nombres de precursores: Darío, Huidobro, Vallejo, y marcando las diferencias y las distancias con lo ecuatoriano. Los nombres de los parnasianos y modernistas se anuncian como los  heraldos de una nueva forma de poetizar, en franca ruptura con un romanticismo de larga existencia entre nosotros, y a una rama del cual dedica Tello uno de los momentos más brillantes de su texto: la  amplia y soberbia reseña de la coronación de Remigio Crespo Toral.

En la Justificación hallamos una incisiva mirada, característicamente suya, que incluso critica los aires tradicionales -y medio litúrgicos- de la ceremonia descrita antes. La historia entra en esta sección, de manera lacerante y dolorosa, al evocar la revolución liberal y altibajos que afectaron a toda la estructura social, incluso la familiar. El análisis de los cómos y por qués de lo poético alcanza un interesante desarrollo. En seguida, el autor entra en el nudo de la obra: el despliegue generacional y sus antecedentes entre nosotros. (O)