BIESS invertiría en el proyecto que arrancará en 2023

Consorcio internacional planea invertir USD 3.000 millones y la administrará por 20 años

El Gobierno busca repotenciar la refinería de Esmeraldas, tras el fracaso que resultó el proceso emprendido por el régimen anterior. Archivo

El Gobierno ecuatoriano tiene un interesado en invertir en la Refinería de Esmeraldas, se trata de un consorcio internacional al que todavía no se le ha dado un nombre, pero que está integrado por empresas como la coreana Hyundai y las compañías estadounidenses Kellog Brown & Root (KBR); RGFX y Energlobal Group, las cuales contará con el financiamiento de Morgan Stanley, una de las bancas de inversión más grandes del mundo.

Tras el lanzamiento del concurso, en septiembre del año pasado, hubo varias empresas internacionales interesadas, según René Ortiz, ministro de Energía, sin embargo, solo un consorcio adquirió las bases y podrá presentar la propuesta el próximo 19 de febrero.

“Aun cuando sea solo una empresa, se continúa, así lo señala el concurso, siempre y cuando se garantice lo mejor para el país, una oferta competitiva y que la tarifa de refinación sea aceptable, que sigamos teniendo combustibles a buen precio, pero a una alta calidad”, señaló Ortiz.

Según Brian Smith, presidente en Houston de Hyundai, el objetivo del proyecto, en el cual planean invertir USD 3.000 millones, es ampliar la vida útil de la refinería, aumentar la calidad del combustible hasta llegar a Euro 5 o Euro 6 y optimizar el uso del crudo, aproximadamente el 40% de lo que se procesa se convierte en residuos.

En cuanto a los tiempos, la ingeniería básica, que permitirá conocer de forma precisa el proceso a seguir y la inversión necesaria, tomará hasta 1 año, con un costo del 10%, luego viene la ingeniería de detalle y la construcción en sí misma, que llevará 3 años. Posteriormente vendrán 20 años en los que el consorcio administrará la planta de refinación, después será devuelta al Estado.

Aunque la capacidad de procesamiento de crudo de la Refinería de Esmeraldas es de 110 mil barriles diarios, muy pocas veces ha alcanzado esta cantidad y además genera un alto porcentaje de residuos que actualmente llegan a 40 mil barriles. El compromiso de Kellog Brown & Root, según Darío Guzmán, gerente senior para Latinoamérica de esta empresa, es que la planta procese el 95% de cualquier crudo y lo convierta en combustibles de alta calidad, con un menor impacto al medio ambiente.

El modelo de negocio que se plantea, según explicó Guillermo Lagos, representante de Energlobal Investment Group, establece que Petroecuador suministrará el petróleo necesario para mantenerla a su máxima capacidad, la empresa procesará el crudo y entregará a la estatal los productos destilados para su venta en menudeo dentro del mercado ecuatoriano a cambio, el país pagará una tarifa.

“El Gobierno del presidente Rafael Correa malgastó más de USD 2.200 millones en tratar de mejorar la refinería y la dejó peor que antes, está a punto de colapsar y se hizo con dinero de los ecuatorianos, este es un proyecto diferente, no lo va a hacer Petroecuador, porque no tiene la tecnología y peor el capital, lo van a hacer empresas con altísimo nivel con su capital, arriesgando su dinero, si algo sale mal, es su responsabilidad”, señaló Fernando Santos Alvite, asesor del Ministerio de Energía que está a cargo del proyecto.

Biess interesado en invertir

Fernando Dueñas, representante del consorcio en Ecuador, afirmó que ha mantenido varias reuniones con quienes manejan los fondos de ahorros previsionales de las instituciones de la seguridad social, entre estas el Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Biess) y de las Fuerzas Armadas, que estarían interesados en invertir en el proyecto.

Guillermo Lagos, de Energlobal Investment, puntualizó que al momento el Biess está sometiendo la propuesta a análisis de su Comité Técnico, en el que se fijará el monto máximo de inversión, que no podrá sobrepasar 20% del capital y el 40% de la deuda, según lo establecen sus reglamentos. Además, habría interés de varios inversionistas extranjeros.