El Fondo de Salud del IESS con vida hasta el próximo año

Fondo de Pensiones también deberá ser modificado

Jorge Wated, presidente del Directorio del IESS.

Se plantea cambios en los servicios que se ofrecen, sobre todo en atención a menores de edad


Pese a que el Gobierno efectivamente le transfirió al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) USD 1.527 millones hasta finales del 2020, que eran parte de la deuda del 40 % del Fondo de Pensiones, Jorge Wated, presidente del Consejo Directivo, advirtió que esto no solucionará la situación crítica que enfrenta la institución, sobre todo el Fondo de Salud, cuyos montos solo alcanzarían hasta finales del próximo año.

“Hay que ver de dónde van a salir los recursos. El pago de la deuda te ayuda; pero si tú no nivelas lo que se aporta, el resultado final es la afectación al Fondo de Salud y a las prestaciones de servicios. Esto se va a ver afectado en el 2022. Estamos trabajando en una propuesta dentro del IESS. La medida que se tome buscará que tenga la menor afectación en los que menos pagan o en los que menos sueldo reciben y si es posible en toda la ciudadanía”, dijo Wated, quien puntualizó que el objetivo es que los cambios no impliquen el aumento de los aportes de los afiliados.

Según explicó Wated, el Gobierno le adeuda al Fondo de Salud USD 3.800 millones, por lo cual ha solicitado una reunión con las autoridades del Ministerio de Finanzas para establecer un compromiso de pago. “Tenemos que sentarnos para ver cuál es el esquema”, dijo.

Sin financiamiento

Sin embargo, el funcionario aclaró que el principal problema radica en que algunos de los servicios y prestaciones que brinda el IESS en materia de salud no están financiados, por lo que generan pérdidas.

El Fondo de Salud se desfinancia anualmente USD 500 millones al otorgar atención a pacientes con enfermedades catastróficas y a los hijos de los afiliados, menores de edad, cuyos montos no cuentan con un financiamiento.

Pese a que la ley establece que el monto para la atención a las enfermedades catastróficas debe provenir de un fondo tripartito, integrado por el IESS, las aportaciones de empleadores y trabajadores, y el Estado, según Wated, el Instituto ha asumido el 100 %, lo cual debe ser cambiado.

Los hijos

En cuanto a la atención de los hijos de los afiliados, Wated puntualizó que el problema no radica en brindarles la prestación, sino que no se haya fijado un pago por este servicio.

“Cuando sumas catastróficas con enfermedades de hijos menores, desde que se creó, son USD 500 millones anuales que le cuestan, quiere decir que el fondo ha venido disminuyendo en USD 500 millones para poder dar la atención y el Fondo no se ha alimentado para que tenga sostenibilidad en el tiempo”, dijo Wated.

Para el funcionario, esta situación ha llevado al Fondo de Salud a una situación “insostenible”; pues, además señaló que en el anterior Gobierno se retiró dinero del Fondo de Pensiones y se alimentó al de Salud para construir hospitales y ese dinero debe ser devuelto. (ASM)-(I).

Fondo de Pensiones, en apuros

La situación crítica que enfrenta el IESS es general y también alcanza al Fondo de Pensiones.

A mediados del año pasado, Jorge Wated advirtió que si el Estado no cancelaba lo que le debía se comenzaría a desfinanciar desde agosto del año pasado. El Ministerio de Finanzas pagó USD 1.527 millones, pero para el director del Instituto, esto no es suficiente.

“La realidad es que el Fondo es insostenible, incluso con el 40 %”, señaló Wated, quien afirmó que en los próximos días publicará un estudio del Banco Mundial en el que se advierte que para que el Fondo de Pensiones se mantenga se necesita ocho afiliados que financien a un jubilado y en Ecuador la cifra llega a cinco. Además, ante la crisis económica que enfrenta el país, es muy probable que el Gobierno deje de pagar el 40 % en corto plazo.

Aunque Wated no dio mayores detalles, afirmó que se trabaja en una reforma legal del IESS para modificar el sistema. “Hoy, es un modelo que por la cantidad de prestaciones va a llegar a un límite, y ese límite ya lo estamos tocando. Estamos llegando a la orilla”, advirtió.