Tras años de trabajos, la empresa municipal ETAPA EP inauguró el proyecto con el cual conducirán agua cruda desde Saymirín a la planta de Tixán. Con esto se llevarán más litros del líquido para ser potabilizados y compartidos a la población cuencana, principalmente a las parroquias rurales de Ricaurte, Llacao, Nulti, Paccha y El Valle.
Para la ejecución del proyecto se hizo un trazado desde Saymirín hasta Ochoa León, que pasó por el margen protegido del río Machángara, y luego se continuó desde Ochoa León a Tixán por la vía que conduce a la plata potabilizadora que dota de agua al 60 % de los habitantes de Cuenca.
El trazado total fue de 4,7 kilómetros. Para el presidente de la Junta de Riego y Canal del Machángara, Ángel Uyaguari, por años habían esperado que sea una realidad el proyecto que, además de la construcción del trazado, se contempló la sustitución del canal Machángara por tubería PVC y la colocación de pozos de revisión.
A más de ello se construyó el interceptor XII del río Machángara que garantiza el funcionamiento del proyecto que costó un poco más de nueve millones de dólares.
El monto que se invirtió fue financiado con un crédito entregado por el Banco de Desarrollo del Ecuador (BDE). “Hace diez años presentamos el proyecto en el Comité de la cuenca del Machángara, a través del economista, que en paz descanse, Oswaldo Larriva. Eso son los recuerdos que nos han quedado y hoy orgullosos inauguremos estas obras”, dijo Uyaguari.
Futuro
Sobre los próximos proyectos relacionados con ETAPA EP, su gerente, José Luis Espinoza, informó que muy pronto estarán listos los procesos de fiscalización y construcción de la planta de tratamiento de aguas residuales en Guangarcucho.
Ese proyecto, que costará más de 60 millones de dólares, es una de las obras prioritarias que requiere la ciudad, debido a que la planta de tratamiento de Ucubamba está cerca de su capacidad máxima. Por otro lado, Pedro Palacios, alcalde de Cuenca, explicó que se consiguieron fondos no reembolsables para dotar de agua potable a Santa Teresita, cuyo sector requiere 350.000 dólares para contar con el líquido vital. (I)
