Un Domingo de Ramos entre la fe y la prevención

El COE cantonal estableció las medidas de bioseguridad para que los fieles vivan la Semana Santa.

La mañana de ayer, Delia Carpio salió temprano en la mañana a la Plaza de las Flores en busca de dos ramos para hacerlos bendecir, desde hace 54 años, comenta, cumple este ritual de inicio de la Semana Santa, una tradición que heredó de su abuela, ya fallecida, y de su mamá de 73 años de edad que se quedó en casa.

La mamá de Delia, Carmen Daquilema, no sale a menos que tenga una cita médica, su hija la cuida para que no se contagie de COVID-19, es por eso que Delia lleva dos ramos benditos a casa, uno para cada una, parte de la nueva normalidad por la pandemia.

Este será el primer Domingo de Ramos que se celebre en Cuenca con medidas de bioseguridad. En el 2020 la celebración no fue pública debido a la cuarentena que, en abril del año anterior, mandaba que todos permanezcan en casa.

La Arquidiócesis de Cuenca es consciente de que esta fiesta religiosa puede generar contagios si no se lleva de una manera controlada y por eso, desde inicio de semana, endurece las medidas de bioseguridad al interior de los templos, informó Monseñor Marcos Pérez Caicedo, Arzobispo local.

El Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional, dispuso que no se otorgue permisos para actos religiosos que impliquen aglomeraciones, incluyendo procesiones y misas campales. La Arquidiócesis acata la disposición y no avala actos litúrgicos masivos en ningún cantón o parroquia eclesial del Azuay.

Otra de las restricciones dispuestas por el COE nacional es el control del aforo al interior de las iglesias. Estas no pueden llenarse sobre el 30% de su capacidad.

Para que esta medida se cumpla sin que los fieles se agolpen a las afueras de los templos o se queden sin recibir el servicio religioso, la Arquidiócesis dispuso que se hagan más misas en este día, todas con aforo limitado.

La Curia informó que los horarios de misas de la jornada de hoy se darán a las 07:00, 08:30, 10:00; 11:30; 13:00; 17:00; 18:30 y 20:00. Adicionalmente se colocó marcas en el piso y las bancas para que los fieles respeten el distanciamiento social.

Delia no acudirá mañana a ninguna de las misas, se quedará en casa y seguirá la transmisión que, a través de Facebook Live, hace la parroquia eclesiástica de El Vergel. Lo hará con su madre para que no se sienta sola.

“Ya dice Dios, cuídate y te cuidaré. Hay que cuidarse ahora para seguir contando con mi mamá y mantener a mi familia sana” dice Delia. Su realidad será hoy la de muchos feligreses que tienen la misma fe, pero dentro de una nueva normalidad. (JMM) (I)