El orden y el odio

Martina Pérez

Muchas veces no nos damos cuenta que cada decisión y posición que tomamos es condicionada, inducida y predecible. Las sociedades se desenvuelven bajo un orden establecido y es en este sentido que los medios de comunicación adquieren un papel importantísimo, son los medios por los cuáles interiorizamos información que define o intenta controlar nuestra orientación. No es una cuestión sencilla el hecho de que en un canal de televisión nacional hayan utilizado la imagen de un líder indígena para consolidar un discurso de odio, para denigrar la identidad no solo de Leónidas Iza sino de toda una organización. Es una forma cercana para encontrar lo que está de fondo: las relaciones de poder. El problema no radica en la posición ideológica de Iza y el movimiento indígena, está en que no son obedientes con el orden y es necesario silenciarlos, difamarlos; interiorizando a la ciudadanía que el enemigo es el que lucha y que su lucha “desestabiliza” al país. Es fundamental entonces, erigir el debate en torno a la violencia simbólica y el racismo en nombre de una mal llamada libertad de expresión. (O)