Son los tardíos arrepentimientos

Roberto Vivar Reinoso

A cada paso el correísmo se arrepiente por haber candidatizado a Lenin Moreno Garcés para la presidencia de la República, apoyándole hasta el triunfo. Pero no sólo los políticos sino el propio pueblo al final del período se hastió del mandatario, al dar el 2 % de votos a su candidata Ximena Peña sin ningún legislador nacional ni provincial. En cambio, volvió los ojos hacia la perseguida “revolución ciudadana”, que tanto luchó para no ser excluida de las elecciones, con 49 asambleístas y 47,7 % al desconocido Andrés Arauz de UNES.

Pero los votantes también debemos hacer un mea culpa por la consulta del 2018, donde aprobamos con el 63 % las siete preguntas del Ejecutivo, que lo interpretó como índice de aceptación. Entre ellas la potestad de elegir a dedo el Consejo de Participación Transitorio, cuyo craso error fue haber ratificado sin concurso a Pablo Celi como titular de la Contraloría. Y ya se rumora la intención del actual mandatario para realizar otro plebiscito, que incluiría la desaparición del Consejo de Participación, menos integrantes del Legislativo y bicameralidad del mismo; en el fondo busca apoyo a los cambios privatizadores que se propone.

Tardíamente se cuestionarán quienes creyeron que de inmediato Lasso bajaría las tasas de interés bancario. Su ministro de Economía negó que vayan hacerlo por decreto; eso sí no tardaron en favorecer a los importadores de 590 partidas con cero aranceles, y 77 de rebaja entre el 5 y 25 %.

Los medios de comunicación no se libran de este incómodo comportamiento. Es el caso del canal de televisión TC, al sacar del aire el programa de “La Posta XXX” ofensivo contra el presidente de la Conaie, Leonidas Iza y el indigenado en general. Esto crea dudas respecto a la autorregulación, que propone el proyecto de ley sobre libertad de expresión. (O)