El Estado Justo

Hugo Darquea López

OPINIÓN  | Cuando se habla del proceso constituyente del Estado, tiene la palabra decisoria el pueblo, tesis de la soberanía popular y le corresponde al gobierno abrir el proceso y todo dentro de la ley. Se pretende la reconstitución del Estado, expresión jurídica y política de la sociedad civil.

Lo que sucede en los países que sufren o han sufrido el impacto del Socialismo de Siglo XXI es la deformación de la Democracia por el hiperpresidencialismo impuesto por esa corriente que utilizando el sistema democrático por tanto pluralista, llegó al ejercicio del poder político, para impulsar el modelo autocrático, dirigido y controlado realmente por un dictador, que mediante la oferta de una pretendida revolución generó un círculo incondicional, que actuó en la base del control de las funciones del Estado y demás instituciones. Hoy, han cambiado estos factores y un gobierno diferente por su origen, pensamiento, composición y procedimientos, busca afianzar el cambio de ese modelo y gestar un orden justo. Puntos esenciales para una Constitución que responda a la realidad y al sistema que se pretende generar.

En consecuencia, se debe establecer un sistema realmente democrático siendo la Ley su eje directriz y a la que todos, por igual estemos ajustados: autoridades, funcionarios y ciudadanos, por tanto, una sociedad civil gestora actuante de los principios de igualdad ante la ley y de efectiva ejecución del modelo de participación social, económica y política en el amplio conjunto de las responsabilidades, derechos y oportunidades. Por tanto, se debe depurar el Estado del entramado de la corrupción que sufre la sociedad, comenzando por el necesario rescate del IESS y en especial la salud

¿Cómo puede haber Estado Derecho ni de justicia y derechos, si se ha despojado a la Seguridad Social de su Patrimonio?  Se dirá que no es así, pero pensemos en la violación de su autonomía y la arbitraria eliminación del 40% de aporte estatal para el fondo de jubilación. Este punto solamente es un ejemplo de la necesidad imperiosa del cambio integral que debemos impulsar. (O)