Las Leonas

Viviana Bernal Estrada

No me considero fanática del futbol, pero es innegable el éxito que alcanzó el equipo femenino del Deportivo Cuenca.  Apenas en los últimos minutos del partido anterior sentí la emoción que asumo, se vive en instantes como esos. 

Enfatizo en la palabra éxito porque podría apostar que no es solo una victoria deportiva, es un logro frente a varios obstáculos que por la condición de ser mujer tuvieron que afrontarlos, individual y colectivamente.  De seguro y con panorama no tan alentador por irrumpir el terreno de lo patriarcal, habrá historias que contar, crónicas rojas con alta probabilidad de creer y de crear, proyectando en el día a día, desde la idea de años atrás, el transformar un imaginario social; claro está, conquistaron un espacio bien merecido para todas ellas. 

Y es que la competitividad en campo deportivo, asignado históricamente a lo masculino, se vierte cuando el sexo opuesto muestra lo impensable, hoy con logros a ciertas, reconocidos y legitimados por la multitud de espectadores.

Celebrando su éxito en la luz, sin duda Las Leonas son ejemplo a seguir. Sobre este trípode de decisión, perseverancia y energía, se proyectan hacia un hito en la historia del futbol ecuatoriano y por supuesto en la historia de mi Cuenca del alma. (O)