Una ciudad brasileña decreta fin de la mascarilla con menos del 50 % vacunado

El municipio brasileño de Duque de Caxias, en el estado de Río de Janeiro (sudeste), decretó el fin del uso obligatorio de la mascarilla, tanto en locales abiertos como cerrados, con apenas el 46,8 % de su población completamente vacunada contra la covid-19.

El alcalde de Duque de Caxias, Washington Reis, justificó la medida con base en el «alto número de personas vacunadas contra el nuevo coronavirus» en la localidad, que cuenta con 900.000 habitantes, y la «caída constante» en el número de infectados.

También recordó en el texto que la Corte Suprema dio a los gobiernos municipales y regionales autonomía para decidir sobre las acciones de combate a la pandemia, que ya ha dejado casi 600.000 fallecidos en todo Brasil.

El decreto esclarece que la medida no se aplicará a aquellos que se encuentren infectados con el virus o sean sospechosos de ello.

Según datos oficiales, un 70 % de la población objetivo de Duque de Caxias ha recibido la primera dosis de la vacuna, pero apenas un 46,8 % tiene el ciclo vacunal completo, es decir, tiene las dos dosis o la vacuna de dosis única.

Esta decisión es contraria además a la recomendación del Ministerio de Salud, que —pese a las presiones del presidente Jair Bolsonaro, quien niega la gravedad del coronavirus— aún no recomienda la liberación del uso de mascarilla.

Otras ciudades de Brasil, como Sao Paulo y Río de Janeiro, las dos más pobladas del país, han iniciado estudios para flexibilizar el uso de la mascarilla.

Desde el pasado 17 de enero, cuando comenzó la campaña de vacunación en Brasil, un 70 % de la población brasileña ha recibido la primera dosis en el brazo, mientras que un 45 % está con la pauta completa.

Con casi 600.000 fallecidos y 21,5 millones de casos confirmados, Brasil es uno de los países más castigados por la pandemia, junto con Estados Unidos y la India. EFE