Una vía alternativa

Gerardo Maldonado Zeas

Buscando soluciones, la vía Migüir-Río Blanco-San Pedro de Yumate sería la alternativa temporal para arreglar el problema del km 49 que tiene en vilo a las autoridades el país.

La situación es que desde años atrás la zona de Río Blanco prácticamente es imposible de atravesar por los conflictos mineros, convirtiéndose en un espacio “rojo” tomado por los comuneros.


El MTOP, según versión de sus voceros, está lista para brindar el apoyo requerido, y en verdad no puede ser de otra manera, pues a pesar de todos los trámites burocráticos y la falta de recursos en el país, sabemos que ya se autorizaron los fondos para arreglar la vía y el MTOP en las próximas horas iniciará los trabajos puntuales en la zona del km 49.

Preocupa de manera general, como unos pocos ecuatorianos, hagan de las suyas en un espacio prácticamente tomado a la fuerza por algunos convencidos de la teoría restrictiva, que viola la Constitución impidiendo el libre tráfico de personas. A viva voz en Cuenca, se sabe que existen políticos, y grupos que, sin entender la grave crisis vial en esta zona, impiden soluciones a un problema estructural, heredado de quienes construyeron la vía sin tomar en cuenta la problemática geológica.

Esta alternativa vial es responsabilidad del Consejo Provincial. Según declaraciones de prensa, alegan que no actuarán por temor a los conflictos de comuneros que se han tomado esta zona como propia. Una persona como fuente directa, comentó que inclusive se cobra cierto peaje para liberar el tránsito. Se debe indagar de manera urgente.

Estamos viviendo los rezagos de toda una política que permitió el libre albedrío en ciertos lugares, en los cuales, bajo el concepto del apoyo al no extractivismo, han hecho lo que les viene en gana. Es verdad, como sostienen los entendidos, que los militares perdieron espacio en el país. Es hora, por ejemplo, de intervenir la zona para que se permita el paso vehicular. Preguntamos ¿desde cuándo las vías son propiedad privada de unos cuantos politiqueros? Ya no más, así como en las cárceles, es necesario la presencia del ejército. (O)