Urge un operador político

Los Ministros de Gobierno son, por lo general, quienes tienden puentes de diálogo y de negociación política entre el Ejecutivo y el Legislativo.

Un buen Ministro de Gobierno debe tener habilidad política, talante para acercarse hasta a la más recalcitrante oposición, intuición para olfatear el momento oportuno a fin de emprender el diálogo, para ceder si el caso amerita, retroceder incluso y luego arremeter con la fuerza del convencimiento; para negociar, no bajo la mesa, peor a cambio de, sino con transparencia y buena fe.

Pocos gobiernos los han tenido. ¿Lo tiene el actual presidido por Guillermo Lasso? La respuesta la da el primer vicepresidente de la Asamblea Nacional, Virgilio Saquicela Espinoza. No, no lo tiene.

Y por eso sus proyectos de ley, por lo general voluminosos, llegan a la Asamblea huérfanos de apoyo político, cuando no, negados de antemano.

El problema es más complejo porque el Ejecutivo apenas sobrevive a su orfandad política. Lo acorrala una oposición legislativa tenaz, poco propositiva, presta a aprovechar el mínimo resbalón y dar su zarpazo.

Como lo advierte el segundo vicepresidente de la Asamblea: no hay acuerdos previos, ni siquiera atisbo de diálogo, por ejemplo sobre el proyecto de ley laboral, del de inversiones. Y son propuestas controvertidas. Suponen pues, en el primer caso, una contraposición casi radical al actual Código del Trabajo; en el segundo, la venta de activos del Estado y la aplicación de alianzas público-privadas, a fin de atraer inversiones extranjeras.

La autoridad legislativa lo dice con claridad: los diálogos no pueden surgir al momento de votar. Tampoco los proyectos de ley deben aprobarse tal cual son remitidos; y esto, como lo advierte, debe entenderlo el gobierno.

Por lo tanto pide al gobierno designar un operador político. Siempre ha sido el Ministro de Gobierno. La actual, ¿tiene los arrestos políticos necesarios para asumir tan urgente tarea, no solo ante la Asamblea, sino ante organizaciones sociales, dispuestas a no dar tregua al régimen, así solo quieran oponerse por oponerse?