Detección de factores psicológicos de la esquizofrenia

Aún no se conoce el origen de la esquizofrenia, una condición de salud mental poco común, que afecta a 1 de cada 300 personas en todo el mundo.

Por: Jasmine Castro y Anthonella Torres
Psicología Clínica (UDA)

La esquizofrenia, también conocida como síndrome de susceptibilidad a la psicosis, es un trastorno neurológico que se diagnostica más comúnmente como un trastorno mental y afecta la percepción de la persona, cómo piensa, cómo siente y cómo se comporta.

Las consecuencias son síntomas psicológicos intensos, incluyendo la discapacidad grave cuando no se trata a tiempo y de manera adecuada, llevándolos a tener psicosis, problemas de conducta y hasta problemas cognitivos, debido a la incapacidad de diferenciar adecuadamente sus propias alucinaciones, de la realidad.

La esquizofrenia puede estar relacionada con malformaciones dentro del cerebro de ciertos químicos naturales, que incluyen neurotransmisores como la dopamina y el glutamato.

Existen estudios que se han realizado para demostrar incoherencias dentro de la estructura cerebral y problemas con el sistema nervioso central de personas con esquizofrenia; aunque, la verdadera causa de este trastorno mental, no se conoce.

Las características fundamentales de la esquizofrenia son alucinaciones, pensamiento confuso o trastornado, una percepción distorsionada de la realidad, habilidades cognitivas defectuosas y problemas de comportamiento. Los síntomas pueden variar con cada paciente, variar en el nivel de gravedad, a lo largo del tiempo o pueden estar siempre presentes.

La esquizofrenia normalmente se caracteriza por episodios de empeoramiento de los síntomas, lo que significa que el individuo diagnosticado con esquizofrenia podría estar completamente inmerso, ya que le va bien en el trabajo, en la escuela, con la familia y los amigos, etc., pero debido a un miedo o una situación que involucra emociones y reacciones intensas, puede hacer que retroceda o desencadenar un episodio psicótico.

Los episodios también pueden variar en el tiempo, donde puede durar días o incluso un par de meses, dependiendo de cuán traumática y estresante sea la situación que atravesó el paciente.

Características de los episodios psicóticos

Estos episodios psicóticos están normalmente categorizados en dos; los conocidos como síntomas positivos, tales como:

• Alucinaciones de base sensorial (auditivo, visual, olfativo, etc.).

• Pensamiento confuso o perturbado, por ejemplo, delirios de persecución, delirios religiosos y delirios de grandeza. • Percepción distorsionada de la realidad.

• Habilidades cognitivas defectuosas y problemas de comportamiento como deficiente aprendizaje e incapacidad para recordar adecuadamente la información verbal, dificultad para concentrarse, entre otros. Y los síntomas negativos, en cambio, que se los reconoce por:

• Dificultad para hablar.

• Retiro y aislamiento de familiares y amigos.

• Falta de motivación para realizar actividades diarias o participar en sus pasatiempos preferidos.

• Signos y síntomas de depresión y ansiedad con posibles pensamientos suicidas. Las personas con esquizofrenia a menudo no comprenden rápidamente estos síntomas o incluso no son conscientes de sus situaciones, por lo que es más común que estos pacientes no busquen la ayuda adecuada que necesitan para sí mismos, lo que hace necesaria la intervención de la familia.

Los síntomas pueden variar con cada paciente, variar en el nivel de gravedad, a lo largo del tiempo o pueden estar siempre presentes.

Existen estereotipos de pensamiento sobre las personas con este trastorno, pues, este tema es desconocido para muchas personas y es complicado salir de ese pensamiento estereotipado.

Lamentablemente, la esquizofrenia no solamente afecta a la persona que lo sufre sino, a las personas que se encuentran a su alrededor como, amigos, familia, en sí, su círculo social; es por esto por lo que los familiares, por lo general, no asimilan o aceptan la gravedad de la enfermedad, porque tiene una idealización errónea sobre la esquizofrenia y suelen tener sentimientos de vergüenza, por lo que terminan alejándose.

Tipos de esquizofrenia

Debido al hecho de que la esquizofrenia tiene varios tipos de síntomas que fluctúan entre diferentes pacientes, es importante dividirlos en categorías según su síntoma más destacado.

  • • Esquizofrenia paranoide está relacionado con los síntomas positivos de la esquizofrenia mencionados anteriormente, incluidos los delirios y las alucinaciones. Afecta el punto de vista de los pacientes y su capacidad para decir lo que es real.
  • • Esquizofrenia no especificada, si bien, es una variante diagnosticada con menos frecuencia, se refiere a un paciente que no se ajusta a las normas o calificaciones de otros tipos de diagnóstico.
  • • Esquizofrenia hebefrénica, tiende a desarrollarse temprano en la vida, más específicamente alrededor de los 15 a 25 años. Se diferencia de los demás por el hecho de que el individuo no tiene alucinaciones; en lugar de eso, muestran síntomas negativos como comportamiento y habla desorganizada.
  • • Esquizofrenia catatónica, ocurre con menos frecuencia en pacientes con esquizofrenia que recibieron un tratamiento adecuado en una etapa temprana de sus vidas. Se caracteriza por la incapacidad de disminución rápida de las habilidades motoras como caminar, correr y movimientos comunes de las manos.
  • • Y, por último, esquizofrenia de tipo residual se diagnostica si el paciente en cuestión al menos una vez en el pasado experimentó un episodio psicótico ya sea muy intenso o muy livianos, pero, actualmente, no parece presentar ninguno de los síntomas positivos mencionados con anterioridad.
  • Es crucial identificar primero, si el paciente tiene esquizofrenia y segundo, en qué parte del espectro se encuentran para que puedan recibir ayuda adecuada ante cualquier síntoma que podría estar complicando su calidad de vida.

Recomendaciones para afrontar la esquizofrenia

Las recomendaciones para afrontar esta enfermedad se basan más en una empatía para el paciente, en el hecho de dar una motivación emocional y, también, el participar para que la persona pueda recibir los mejores cuidados.

Es fundamental entender que la persona, en ocasiones, no es apta para poder comunicarse y, en algún hecho, solo la persona cuidadora podrá establecer comunicación sobre su comportamiento.

La familia es un pilar fundamental para que el paciente pueda integrarse a la vida social.

La doctora Guillén, asegura que la forma más importante y eficaz para ayudar a estos pacientes es brindarles apoyo y hablar con un médico psiquiatra para recibir atención profesional. También es necesario saber reconocer las conductas y síntomas de la enfermedad, ya que cuando nos encontramos cerca de la persona que lo padece, nos puede sorprender ciertos comportamientos extraños.

Lo importante es que cuando la persona muestre síntomas psicóticos, se lleve un escrito de cada uno de los síntomas, dosis de medicamentos y los efectos que estos producen en el paciente, ya que así va a ser mucho más fácil reconocer cuándo el paciente sufrirá una recaída o identificar los signos de alerta.

El concienciar a los demás es un aspecto fundamental ya que, por lo general, las personas con esta enfermedad piensan mucho en la opinión de los demás hacia ellos; de allí que se debe fomentar la vinculación entre el paciente, su familia y el círculo social, para mejorar la comunicación y confianza, con la finalidad de que pueda adaptarse con facilidad al círculo social.

Con la ayuda de tratamientos antisépticos el trastorno puede controlarse, de manera que la persona puede realizar sus actividades diarias sin que los síntomas interfieran, llegando a tener una vida plena. Contar con el apoyo afectivo y emocional por parte de la familia y amigos, es muy importante para que las personas que sufren de esquizofrenia puedan mejorar su calidad de vida. (NNM)