Río Jubones

Nicanor Merchán Luco

Con suerte pude recorrer el trayecto del río Jubones ubicado en las provincias del Azuay y El Oro el que tiene una cuenca de unos 4.000 km. cuadrados, en sus orillas hasta su desembocadura existe una rica flora y fauna con especies como el tejo y el acebo y árboles como el endrino, sauco, peonía entre otros. Sin embargo, en estos últimos 30 años los estudios señalan que se han perdido miles de hectáreas de bosques. Nace en los páramos de la cordillera occidental recibiendo las aguas de los ríos Rircay y del León y también son afluentes los ríos Achucay, Casacay, Huizho, Muyuyacu, Cune y Galayacu.

Después de Santa Isabel y pasando por Uzhcurrumi se llega a la represa denominada Minas-San Francisco que tiene la capacidad de generación de 275 mw y desemboca sus aguas en el canal de Jambelí en el Océano Pacífico; diagonal a su desembocadura se encuentra la isla Jambelí dedicada al turismo y a la producción de camarones. Sus playas por estar tan cerca de la desembocadura del Jubones reciben la influencia de este río. La represa de Minas-San Francisco ha incidido en el clima y ahora existe más humedad.

Las aguas de la represa luego de generar la energía eléctrica son conducidas por una tubería hasta ser vertidas cerca de Porotillos al mismo río Jubones. Todos recordamos que en Porotillos se dio el combate entre Ecuador y Perú en 1941. Estas aguas que podrían ser reutilizadas tanto para riego o para consumo humano van a parar nuevamente en el río Jubones para conducirse rápidamente al océano. No se puede desperdiciar tanto líquido vital sin consideración alguna. El ejemplo de Saymirín en la cuenca alta del Machángara se debe estimular y copiar con el propósito de que estas aguas sirvan de mejor manera para las poblaciones El Pasaje, El Guabo y Machala y sobre todo para los sembríos de banano y la agricultura. (O)