Latinoamérica debe buscar «creatividad» para sus políticas públicas de salud

Los países latinoamericanos deben apostar por formas más creativas de aplicar sus políticas de salud en un contexto de recuperación de la pandemia de la covid-19 y de rezago en la atención de pacientes, dijo este domingo un experto.

«La región debe seguir haciendo lo mismo que había venido haciendo, pero de verdad, implementar las políticas de una manera más creativa», declaró a Efe el doctor en Salud, Políticas Públicas y Economía Héctor Castro, quien esta semana participó en Costa Rica en un foro de Salud.

Castro comentó que esa creatividad abarca desde maneras para aumentar la inversión en salud, hasta ser más eficientes en la inversión y en la selección de medicamentos y tecnologías.

«En inversión estamos lejos de los países referentes de la OCDE (Organización para a Cooperación y Desarrollo Económicos) que es del 8,8 % del PIB (producto interno bruto) «, afirmó Castro, quien es líder de Políticas Públicas de la empresa Roche.

El experto reconoció que aumentar la inversión en salud en la región «es difícil» pero se tiene que «pensar una ruta positiva en que los Gobiernos inviertan más».

Otro punto que señaló Castro es que los países latinoamericanos deben ser «más eficientes en la distribución de recursos, selección de medicamentos y tecnologías que se financian con recursos públicos».

Castro también instó a los países de la región a implementar formas novedosas de negociar la compra de medicamentos y tecnologías en salud, como por ejemplo contratos basados en el desempeño del producto.

EL IMPACTO DE LA COVID-19

También analizó el impacto que ha tenido la pandemia en los servicios de salud en Latinoamérica, especialmente en el rezago en la atención de pacientes y los efectos en la promesa de brindar un acceso universal a la población.

«En nuestros países una cosa es la declaración de cobertura universal y otra el acceso efectivo a los servicios, pues la población encuentra largas filas de espera, desabastecimiento de medicamentos, dificultades para test diagnósticos, y es un panorama que ha sido agravado por la pandemia», explicó.

Castro aseguró que la pandemia afectó tanto la oferta de los servicios como la demanda.

«Las personas se quedaron en sus casas y no buscaron atención por temor a infectarse y por las políticas restrictivas a la movilización. Eso hizo que se cayera la demanda y que la gente postergara sus chequeos preventivos», dijo.

Según Castro, esta situación podría significar a futuro un aumento de enfermedades que eran posible prevenir o tratar a tiempo, y por ende, un incremento del gasto para los sistemas de salud.

En cuanto a la oferta, el experto comentó que los países se vieron obligados a canalizar la mayoría de sus servicios para la atención de la covid-19 y otros se convirtieron en telemedicina, a lo que se sumó un desabastecimiento de medicamentos.

«El impacto en la demanda y en la oferta de servicios afecta la salud de las personas y potencialmente tendrá un impacto en su calidad y expectativa de vida», expresó. EFE