Universidad Católica de Cuenca presenta sus inventos en feria tecnológica

Ayer, docentes investigadores presentaron sus inventos al sector productivo. Xavier Caivinagua/El Mercurio

Un dron que salve vidas, un robot social o un dispositivo electrónico que permite la obtención de muestras seminales de cobayos: estos son algunos de los proyectos que docentes y estudiantes de la Universidad Católica de Cuenca presentaron ayer en el primer encuentro que tuvo la institución con el sector productivo.

La idea de la reunión entre la academia y las empresas surgió con el afán de que los proyectos que empezaron como una idea, y que se cristalizaron con mucho esfuerzo y superando pruebas y errores, no se queden en las aulas de la universidad cuencana que cuenta con un Centro de Investigación, Innovación y Transferencia Tecnológica.

Pero, sobre todo, el objetivo del encuentro fue que el sector productivo conozca las herramientas creadas bajo el contexto ecuatoriano para que puedan replicarlas a mayor escala.

Fue así como diez proyectos que tienen el registro de propiedad intelectual se presentaron en la feria tecnológica.

Los docentes investigadores presentaron una serie de proyectos en la primera feria tecnológica que acerca a la academia al sector productivo. Xavier Caivinagua/El Mercurio

Para Lilia Bravo, jefa de Propiedad Intelectual de la Universidad Católica de Cuenca, era necesario ya esta primera reunión porque, a través de ella, se puede ir pensando en el desarrollo de nuevas herramientas.

No obstante, para eso, el sector productivo debe conocer lo que puede crearse en las universidades.

“Es un poco utópico que nosotros podemos desarrollar tecnología de punta porque existen países que tienen años luz haciéndolo, pero nadie lo va a hacer contextualizado como lo vamos a hacer nosotros, porque lo estamos haciendo para nuestro medio, para nuestras necesidades”, opinó Bravo.

Beneficios

Entre los trabajos que se presentaron estuvo “DROPI”, un dron que detecta los signos vitales a través de una cámara. Este vehículo volador se créo con el objetivo de realizar un triaje rápido para gestionar el rescate de víctimas que, por ejemplo, estén atrapadas.

Su creador es el docente e investigador Juan Cobos, quien, desde hace seis años, lleva trabajando en él, y que, con la feria tecnológica, pudo mostrarlo a los posibles interesados en producir su vehículo no tripulado.

“La idea es que la ciencia no se quede solo en la universidad. Eso se está quedando en la universidad ecuatoriana. Todo lo que hacemos se queda en las aulas. O lo que yo digo, las tesis empolvándose en las bibliotecas. Es hora de salir, de dar soluciones”, dijo Cobos a El Mercurio.

Juan Cobos, creador de DROPI. Xavier Caivinagua/El Mercurio

Junto a DROPI estuvo “CeCI”, un robot social que se puede usar como servicio de entrega o como equipo telemático. El aparato, que se puede controlar desde un celular, lo ideó el docente Carlos Flores, mientras estudiaba con una beca en Barcelona, España.

Tras su regreso a Cuenca, la Universidad Católica lo apoyó para que arme el prototipo que está listo para ser producido en serie.

Para el investigador, el encuentro, además de ese acercamiento con el sector productivo, puede ser el primer paso para que Cuenca tenga un parque científico.

“Este es un primer acercamiento para que, en algún momento, tengamos un parque tecnológico. Normalmente estos parques funcionan de esta fusión de la academia, investigadores y el sector productivo en donde hay miles de necesidades”, explicó Flores.

“CeCI”, un robot social que se puede usar como servicio de entrega o como equipo telemático. Xavier Caivinagua/El Mercurio

Impulsar soluciones

La Universidad Católica de Cuenca emprendió un proyecto para impulsar la creación de prototipos y herramientas tecnológicas que sean requeridas por las empresas.

Para esto, si el sector productivo invierte en el desarrollo de una solución a través de los estudiantes e investigadores, la institución universitaria doblará esa inversión.

El objetivo es que las empresas y emprendimientos confíen en la academia y sus actores, y que, desde la universidad mediante sus espacios, como el Centro de Investigación, Innovación y Transferencia Tecnológica entregue soluciones a las necesidades que tiene el sector productivo ecuatoriano. (I)