Un sueño perdido

Andrés F. Ugalde Vázquez

¿Será cierto que al morir los sueños muere el hombre con ellos? Y lo digo a propósito del día de hoy en el que se recuerda el fin del bello sueño de la Gran Colombia. Y uno se pregunta ¿Cómo es que dejamos morir el sueño? ¿Por qué hoy, casi dos siglos después, somos aún incapaces de volverlo realidad?


Las repuestas habrán de buscarse en la historia. Desde la creación del gran Estado que le dio una lección al mundo de democracia, reconociendo las libertades y proscribiendo la esclavitud… Desde la terrible pugna de poderes entre federalistas y centralistas, que llevó a Bolívar, desesperado, a abolir los poderes e iniciar la dictadura. Y llevó también a Santander, Sucre y La Mar, sus compañeros de campaña y hermanos fraternos, a una dolorosa oposición por salvaguardar la democracia. El Libertador de América enfrentado a los Arquitectos de la República mientras la Gran Colombia se desangraba en silencio.


Finalmente, no pudiendo tolerar más la dolorosa división y buscando recuperar la unidad de los pueblos, el mismo Bolívar decide renunciar a la Presidencia de la Gran Colombia en enero de 1830. Y así, en el profundo silencio de la complicidad, es como la Gran Colombia, el bello ideal del Congreso de Angostura que había sido defendido con uñas y dientes en Carabobo y Pichincha, se dejaba morir sin pena ni gloria un 6 de mayo como hoy, allá por 1830.


Lo curioso es que, a los pocos días, moría asesinado en la selva de Berruecos el enorme Antonio José de Sucre, el “Gran Mariscal de Ayacucho”. Sería también antes de terminar el año, que desaparecerían, enfermos de pena y amargura, el mariscal cuencano José Domingo La Mar y el mismísimo Libertador Simón Bolívar. Y no termina allí, sin embargo, el azar de la historia. Pues sería otro 6 de mayo la fecha exacta en la que dejarían de existir, también, el General Francisco de Paula Santander (1840), y el General venezolano José Antonio Páez (1873), el Centauro de los Llanos de Venezuela. ¿Sera cierto que al morir los sueños muere el hombre con ellos? ¿Cree Usted en las coincidencias? Yo no…

@andresugaldev