Portugal registró en las últimas dos semanas un exceso de 1.063 fallecimientos sobre la media habitual en este periodo, cifras que las autoridades sanitarias atribuyen a la ola de calor que sufre el país.
La Dirección General de Salud (DGS) lusa precisó que entre los días 7 y 18 de julio se observó un exceso de mortalidad cifrado en 1.063.
«Las temperaturas extremas del aire, como las que se han producido en los últimas días (máximas y mínimas) tienen un potencial impacto conocido en la salud, como consecuencia de la deshidratación, descompensación o enfermedades crónicas, entre otros factores», agregó la DGS en un comunicado.
El país batió el 14 de julio un récord de temperaturas, con una máxima de 47 grados registrados en Pinhão-Santa Barbara (Viseu), según el Instituto Portugués del Mar y la Atmósfera (IPMA).
El organismo destacó asimismo que la ola de calor de las últimas semanas fue la «más intensa con mayor duración y extensión especial» en el mes de julio desde 1941.
El periodo del 1 al 17 de julio fue el más caliente desde el año 2000, con un valor medio de temperatura de 25,7 grados, 3,6 puntos superior al valor medio.
Desde el día 6 se registraron valores muy altos de temperatura del aire, con alerta roja de calor para la mayoría de los distritos de Portugal continental. EFE
