Alto riesgo

José Chalco Salgado josechalcosalgado@gmail.com

            El Gobierno Nacional eligió el camino de mayor riesgo. El referéndum para enmendar varios artículos de la Constitución, será parte de la papeleta electoral del 2023. Proceso electoral de alto riesgo.

            Es un camino riesgoso por lo inestable de su resultado. Si se quiere, por la popularidad de un momento que pueda tener el Gobierno y que pese a ser una buena propuesta la consulta, termine heredando la antipatía o simpatía al poder en un determinado momento y entonces fracase u obtenga una votación endeble.

            El resultado de la consulta popular planteada a los ecuatorianos, puede traer consigo la expresión, más de afectos antes que de la objetividad por la intención y los cambios constitucionales propuestos. Además, el riesgo de las preguntas aumenta ampliamente cuando muchas de ellas requieren el complemento de la actividad legislativa de la Asamblea Nacional, pues será necesaria una posterior producción de normativa legal para su efectiva vigencia.

            Luego, el riesgo no termina. Las preguntas, no todas son preocupaciones actuales y de pálpito de la gente de a pie; sino más bien atienden a un orden institucional, democrático y republicano, si se quiere, de aquella esencia que a la población no precisamente interesa ni se la ha educado a tal fin.

La extradición y la reducción del número de asambleístas podría interesar a la gente más que otras preguntas como la creación del Consejo Fiscal, el número mínimo de afiliados a los movimientos políticos, el sistema nacional de protección hídrica de áreas protegidas, el apoyo a comunidades bajo el contexto de compensaciones, o las atribuciones del Consejo de Participación.

En fin, las transformaciones también necesitan de tomar riesgos. Las intenciones se integran por acción y decisión. Por riesgos que se corren, pero que deben acompasarse de acciones y planes contingentes que minimicen -de haber- los efectos negativos; o en su defecto, que planifiquen los caminos siguientes para sofocar, digamos mejor, para apagar los incendios.  (O)