América promueve la equidad y rechaza violencia machista en Día de la Mujer

La jefa de la oficina de ONU Mujeres en Bolivia, Nidya Pesántez. La innovación y la educación digital representan una gran oportunidad para el empoderamiento económico de las mujeres en uno de los países latinoamericanos con mayores índices de violencia machista, contó en una entrevista Pesántez. Sobre este tema ONU Mujeres ha detectado variables que limitan la incursión de la mujer como la poca formación desde la infancia en ciencias y tecnología, el acceso a la infraestructura digital, la necesidad de alfabetizar digitalmente y un factor aún más grave que es la violencia en el mundo tecnológico. EFE

Gobiernos, organismos multilaterales y organizaciones feministas de América se sumaron este 8 de marzo de 2023 a la conmemoración del Día Internacional de la Mujer con mensajes de apoyo, anuncios en pro de la equidad de género y contra la violencia machista.

Una de las primeras personalidades en hacerlo fue el secretario general de la ONU, António Guterres, quien llamó la atención sobre la discriminación que enfrentan las mujeres e instó a «tomar medidas en varios frentes».

Guterres hizo hincapié en la importancia de garantizar que las mujeres y las niñas «puedan contribuir plenamente al avance del conocimiento científico y tecnológico a nivel mundial«.

Por su parte, el presidente de EE.UU., Joe Biden, rechazó los «ataques a los derechos» de las afganas, iraníes y ucranianas, y destacó las medidas adoptadas por su Administración para luchar contra la violencia de género, como el aumento a la financiación de la Ley de Violencia contra las Mujeres a 700 millones de dólares, la mayor cifra en la historia, para mejorar el acceso a servicios, justicia y cuidados para las sobrevivientes.

En México, donde Aministía Internacional (AI) denunció este miércoles la negligencia y omisión del Estado para prevenir y erradicar la violencia contra las mujeres, el presidente, Andrés Manuel López Obrador, autoproclamó su Administración como «feminista».

Mientras tanto, en Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva anunció 20 medidas para alcanzar la igualdad salarial, combatir la violencia de género y garantizar la salud menstrual, entre otras medidas en pro de los derechos de las mujeres.

También en Suramérica, los Gobiernos de Perú y Colombia se pronunciaron en pro del empoderamiento femenino.

«Reitero mi compromiso, el compromiso del Gobierno, con la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer en todos los ámbitos», dijo Dina Boluarte, primera presidenta de Perú, que llegó al poder por designación del Congreso tras el fallido autogolpe de Pedro Castillo.

Al tiempo que, Francia Márquez, vicepresidenta de Colombia, recordó que «la responsabilidad de la garantía de los derechos de las mujeres en Colombia no es solo de las mujeres» y puso en valor a las «indígenas, campesinas, afrodescendientes y a las feministas de Colombia que han llevado la bandera en alto».

MOVILIZACIONES Y ACTOS SIMBÓLICOS

Durante la jornada, miles de mujeres se movilizaron a lo largo del continente exigiendo el cumplimiento de sus derechos, y reivindicando la lucha feminista que en los últimos años ha logrado avances significativos en materia de derechos reproductivos, como el caso de Colombia, donde en febrero de 2022 la Corte Constitucional despenalizó el aborto hasta la semana 24.

En México, miles lo hicieron en la icónica Glorieta de las Mujeres que Luchan y, por primera vez, las pacientes oncológicas se unieron como contingente para ser parte de la movilización.

También se movilizaron con sus cuerpos como bandera de orgullo mujeres que a sí mismas se nombran «gordas», para combatir el significado peyorativo de la palabra, las cuales conformaron otro contingente para marchar por quienes son invisibilizadas en este tipo de actividades.

Más temprano, en Venezuela, unas 300 mujeres salieron a las calles para exigir el cumplimiento de sus derechos laborales, así como mejoras en las normativas que contemplan asuntos como la violencia de género o la salud sexual y reproductiva, entre otros.

Horas después, el presidente Nicolás Maduro anunció la creación de un «gran» programa social con el que, prometió, se pondrá «a la mujer en el centro de atención» del trabajo de su Gobierno, sin hacer mención a las movilizaciones que se dieron durante el día.

Mientras que en EE.UU, la primera dama, Jill Biden, premió a once mujeres «valientes» de todo el mundo, entre las que destacan la argentina Alba Rueda y la costarricense Doris Ríos.

Asimismo, en Nueva York los trapos de cocina gigantes de la artista española Elena del Rivero ondearon en la monumental escalinata de la Alcaldía como un particular homenaje feminista, cargado de ironía.

No fue así en Cuba, donde se conmemoró la jornada sin autorización gubernamental para realizar marchas reivindicativas, pero sí hubo las «felicitaciones» a las insulares de distintos organismos oficiales.

Del mismo modo, Indígenas en Ecuador, feministas «contra el hambre y la opresión» en Uruguay y activistas, trabajadoras y profesionales panameñas alzaron sus voces para exigir una vida digna, libre y con derecho a la seguridad social.

TAREAS PENDIENTES

La conmemoración del Día Internacional de la Mujer en América también se convirtió en una oportunidad para elevar los reclamos sobre los derechos reproductivos.

Tal es el caso de República Dominicana, donde la ministra de la Mujer, Mayra Jiménez, subrayó que en el país, donde rige una prohibición total de la interrupción del embarazo, no se puede seguir posponiendo el tema del aborto.

Asimismo, durante esta fecha diversas organizaciones alertaron sobre la ola de violencia machista que continúa siendo una problemática en la región, como es el caso de Argentina, en donde durante el primer bimestre de este año hubo 51 feminicidios.

Países como Honduras, Nicaragua y El Salvador reportan en lo corrido del año 76, 16 y 12 feminicidios, respectivamente, según cifras de organizaciones que trabajan por los derechos de las mujeres.

Las números en Centroamérica no distan de la triste realidad en otros países del continente como Brasil, que en 2022 registró 1.410 feminicidios, un número en un 5 % superior al de 2021 (1.337); las de Perú, donde el Poder Judicial reportó 600 casos de violencia machista y casi 30 feminicidios este año, o Colombia, donde son atendidas 5 mujeres al día por violencia de género, según la Defensoría del Pueblo.

Igualmente, en Chile, donde las mujeres jugaron un papel determinante en el estallido social de 2019, el presidente de izquierdas, Gabriel Boric, que inició su Gobierno en 2022 con un gabinete paritario, pidió que el nuevo proceso constituyente no deje de lado ese principio.

Finalmente, desde Bolivia Nidya Pesántez, jefa de la oficina de ONU Mujeres en ese país, indicó en una entrevista con EFE que la innovación y la educación digital representan una gran oportunidad para el empoderamiento económico de las mujeres en uno de los países latinoamericanos con mayores índices de violencia machista. EFE