Macará esta a punto para su primer desafío del 2020: enfrentar y superar al colombiano Deportes Tolima en la fase de repesca de Copa Libertadores, el próximo 4 de febrero en la fría ciudad de Ambato, a 2.580 metros de altitud sobre el nivel del mar, dijo hoy su presidente, Miller Salazar.
“El equipo ya está a punto, esperamos que los refuerzos tanto locales como extranjeros tengan la respuesta favorable en la disputa de Copa Libertadores ante un difícil rival como el Deportes Tolima”, señaló a Efe Miller Salazar, presidente del club.
Para Salazar, el fútbol colombiano ha progresado enormemente y que Deportes Tolima es uno de los mejores equipos del momento, por lo que “será un gran desafío enfrentarlo y superarlo”.
Salazar aseguró que para Macará “será complicado superar la campaña del año pasado, por lo que ese será el objetivo”, pues el equipo ganó la primera etapa del torneo local del año pasado, pero quedó eliminado en las semifinales, truncando en forma inesperada la posibilidad de alcanzar el título.
El directivo lamentó no haber logrado retener a las principales figuras, puesto que entró a la disputa por sus pases contra cuadros que ofrecieron mejores contratos como Barcelona, Liga de Quito y Aucas.
Fruto de esa gran campaña, el cuadro se quedó sin el portero argentino Javier Burrai, que pasó al Barcelona; el defensa argentino Alejandro Manchot, que se fue al Aucas; el también defensa Moisés Corozo, contratado por Liga de Quito y el goleador del cuadro Michael Estrada, pasó al Toluca, de México.
Entre las figuras extranjeras contratadas para este año, están los argentinos Agustín Silva (portero), Brian Molina (defensa), Angel Viotti (extremo), el colombiano Sebastián Herrera (delantero) y el venezolano José Balza (atacante).
Entre las figuras locales están los defensas John Narváez, Fernando Mora, el centrocampista Roberto Garcés, los atacantes Pablo Mancilla y Johnny Uchuari.
Salazar aseveró que “para el próximo 4 de febrero aspiramos haber resuelto los problemas de iluminación en el estadio” ‘Bellavista’, que fueron observados por la Confederación Sudamericana de Fútbol (CSF) para evitarse una sanción económica. EFE