Por el mejor camino

Juan F. Castanier Muñoz

Cuando Correa “hizo” designar Fiscal al doctor Galo Chiriboga, muchos ecuatorianos no estábamos de acuerdo con tal designación pues, a más de que en el concurso se denunciaron algunas irregularidades, el solo hecho que Chiriboga se desempeñaba como embajador del Ecuador en España, es decir, era un empleado gubernamental, lo inhabilitaba moralmente para desempeñarse, sin conflicto de intereses, como Fiscal General, habida cuenta de que un Fiscal, al representar la vindicta pública, debe hacerlo con salvaje imparcialidad y libre, absolutamente, de cualquier presión, venga de donde viniere. Los resultados ya los conocemos: la gestión de Chiriboga fue un triunfo para el gobierno de Correa y un fracaso perfecto para la sociedad ecuatoriana.

La actual Fiscal Diana Salazar, ha tenido que enfrentar procesos complejos, y si bien su desempeño creó expectativas importantes, ella no ha defraudado esas expectativas y, en cumplimiento de sus atribuciones, ha ido desbrozando el camino de muchas alimañas y enredaderas legales. Y lo ha hecho con propiedad, con entereza, con conocimiento, pero, sobre todo, con la voluntad de hacerlo. La Fiscal Salazar debe saber que existimos muchos ecuatorianos que respaldamos su gestión y la de su equipo, como respaldamos también la gestión del Procurador Íñigo Salvador. No estamos movidos por odios ni  nos impulsa ningún sentimiento negativo, nos impulsa el deseo de “recuperar la patria” como dicen en una cansina arenga ciertos panegiristas del correismo, pero no como ellos desean “recuperarla” para recuperar el poder, las prebendas, las canonjías, los contratos a dedo, los sobreprecios, los reajustes, sino recuperar la dignidad de la patria, la respetabilidad de su imagen.

El juicio “Sobornos” se ha vuelto emblemático en el Ecuador porque además de que huele mal por todos lados, involucra a buena parte de la “banda” y, de darse bajo conductas honestas y apegadas a la ley, impedirán que estos “angelitos” puedan volver a optar por candidaturas a cargos de elección popular. Adelante señora Fiscal, señor Procurador y señores Magistrados, ¡el país está con ustedes! (O)