Por segundo año consecutivo, el profesor Julio Chuqui será galardonado como el “Mejor Entrenador” de Federación Deportiva del Azuay durante la “Noche de Gala del Deporte Azuayo”. Será la tercera distinción de tal magnitud durante sus casi 49 años de vida. Los primeros reconocimientos se dieron en 2011 y 2018.
– ¿Qué representa este nuevo reconocimiento?
Para nosotros es una pasión el entrenamiento deportivo, el reconocimiento es producto del esfuerzo diario de los chicos, el apoyo de la dirigencia, de la prensa, y de lo que uno puede aportar en la organización, en el hecho de amalgamar varios aspectos del entrenamiento, del quehacer diario del deporte, los ajustes continuos y permanentes que hay que hacer a las distintas planificaciones… Nosotros tenemos un grupo bastante compacto de atletas que requieren la individualización (del trabajo), tenemos corredores de 800, 1.500, de obstáculos, no videntes, de fondo, de maratón, marchistas de 20 y 50 km, eso hace que nos ocupemos gran parte del día en la planificación, en la evaluación de los diferentes componentes del entrenamiento deportivo.
– ¿Hay de parte de ustedes una capacitación constante por el hecho de tener deportistas de diferentes especialidades?
Ventajosamente en la Universidad (Politécnica Salesiana) tenemos las herramientas, los mecanismos para la investigación. La ciencia avanza continua y permanentemente, nosotros tratamos de no desfasarnos de esta situación. Además, es algo que nos gusta, nos apasiona y eso es lo bueno, no lo tomamos como trabajo… No solo es entrenamiento deportivo, no solo es fisiología del ejercicio sino son otros aspectos también, incluso la parte motivacional, estar siempre pendiente del comportamiento psíquico de los chicos. Hay veces que con verle entrar al deportista uno intuye alguna situación anormal y lo primero que uno hace es conversar con él, reanimarle y varias de las veces modificar la planificación establecida porque si el deportista no está al 100 % de sus capacidades es obvio que no va a rendir…
– ¿Hoy está dedicado a su grupo (Chuko’s) y a la docencia?
Sí. Vamos a cumplir 12 años en la Universidad. El grupo sigue. Todavía tenemos la confianza de la mayoría de los chicos, nadie se ha desprendido… nosotros lo que podemos hacer es tratar de retribuir esa confianza con más trabajo, más apego y más ganas que nunca.
– ¿Ante la emergencia sanitaria que estamos viviendo, qué plan están llevando a cabo ustedes considerando que no pueden utilizar los escenarios deportivos?
Lo que hemos hecho, en primera instancia, es replantear los objetivos tomando en consideración que todos los eventos a nivel mundial están prácticamente paralizados y suspendidos y otros ya cancelados.
Consideramos que esta emergencia va a atrasar este tipo de eventos aproximadamente tres o cuatro meses, es lo mínimo que avizoramos, no podemos hablar de certezas. Hemos conversado con los chicos y todos debemos entrar a una etapa general nuevamente, bajar las cargas e intensidad y trabajar multilateralmente.
Ante la situación que no vamos a disponer de escenarios ni siquiera de gimnasios, lo que hemos intentado es diseñar nuestra planificación a efecto de que pueda realizarse en lo posible dentro del mismo domicilio, talvez en una bicicleta estática, en una caminadora, a trabajar la fuerza isométrica.
En lo posible, si hay como trasladarse a una montaña, vamos a trabajar mucho sobre todo con los deportistas que tengan esa posibilidad, que tengan vehículo, etc., no así con los más pequeños… tendrán que descansar y hacer un trabajo alternativo en la casa si es que pueden…
– Algunos deportistas estaban tras la clasificación a los Juegos de Tokio. ¿Cómo está la situación de ellos o ya se descarta de plano esas posibilidades?
Al no realizarse el Maratón de Viena programado para el 19 de abril, Paolita (Bonila) se queda sin esa posibilidad. Habíamos visto otra alternativa quizás en Canadá, el Maratón de Otawa, el 22 de mayo, pero con esta situación se nos complica todo….
He dicho a los chicos que tratemos de mantener la calma, ojalá el sistema clasificatorio nos de algún tipo de facilidades, esperemos…, quizá Daniel (Pintado) es uno de los que está un poco tranquilo (por estar clasificado a Tokio), pero el mismo (Jhonathan) Cáceres estaba entusiasmado por su clasificación al Mundial (de Bielorrusia). Pensábamos que allí podía hacer una buena marca la misma que le podría posibilitarle entrar a Tokio, pero realmente se nos complicó…
Esperemos salir de la crisis y después retomar de la mejor manera las prácticas y sobre todo la participación en eventos que les permita a los chicos acceder a los Juegos Olímpicos. (BST)-(D)
DETALLE
Julio Chuqui trabaja con la asistencia de Byron Saquipay y de su esposa Diana Ramón. Entre los deportistas que buscan su clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokio, además de Daniel Pintado, están: Johana Ordóñez, Magaly Bonilla (20 km marcha), Jhonathan Cáceres (50 km marcha); Paola Bonilla (maratón); Darwin Castro con sus guías Sebastián Rosero y Diego Arévalo (1.500 y 5.000 metros).