¡Apremia regular ríos!

Gonzalo Clavijo Campos

La cuenca  hídrica del río Tomebamba tiene una extensión de 233 Km2 en Sayausí, la del Yanuncay 238 Km2 en Sustag  y la del río Machángara 235 Km2 en Saymirín. En períodos de estiaje el Matadero se reduce a 830 l/s, el Yanuncay a 890 l/s, sin embargo el Machángara se mantiene con un caudal  de 3.000 l/s para la provisión del líquido vital, riego y otros usos básicos.

¿Cuál es la razón para el mantenimiento de caudales constantes en el río Machángara, superiores en un 300% al Tomebamba y Yanuncay, si las cuencas hídricas tienen una extensión similar a  los 235 Km2?

Se debe a que el río Machángara es el único recurso que está regulado cuidadosamente en su cuenca alta por ELECAUSTRO S.A, con las represas: El Labrado con una capacidad de 6 millones de m3 y  Chanlud con 17 millones de m3. Estos grandes reservorios son llenados durante los meses de lluvia y se vierten en períodos secos, obteniéndose caudales constantes de 3.000 l/s, además las crecientes máximas en invierno son inferiores que los otros ríos por la capacidad de laminar las mismas en las dos grandes presas.

En el mes de marzo, con escasas precipitaciones, el Señor Gerente de ETAPA recomendaba reducir los consumos de agua en las viviendas por el incremento del 20% durante la cuarentena, para evitar razonamientos, igual preocupación provendría de los Presidentes de las Juntas de Agua Potable.

Sin embargo en este mes, se produjeron intensas lluvias con el desbordamiento de ríos,  quebradas y  lamentables afecciones como el caso de la vía  Sustag-Soldados, lo cual debe llevar a la Corporación Municipal de Cuenca, ELECAUSTRO y ETAPA al pronto inicio en la ejecución de obras de regulación sobre todo de los ríos Tomebamba y Yanuncay por su importancia en la provisión de agua y la necesidad de controlar las inundaciones y evitar lamentables consecuencias para Cuenca y sus habitantes.