Este año el Corpus Christi o llamado Septenario, que se celebra cada junio en Cuenca, no tendrá la tradicional feria de venta de dulces, debido a la emergencia sanitaria por el coronavirus o Covid-19.
Esta celebración religiosa representa para la Iglesia Católica una de las más importantes festividades litúrgicas: la adoración del Cuerpo y la Sangre de Cristo en el Santísimo Sacramento del Altar.
En la parte cultural y comercial en cambio es una de las fiestas de golosinas más grande del país, además de un espectáculo de artes populares, especialmente, por la pirotecnia que se utiliza.
Marcos Pérez Caicedo, arzobispo de Cuenca, explicó que para este Corpus Christi se aplicará el protocolo de bioseguridad que está actualmente vigente para el ingreso a la Catedral La Inmaculada.
Por ahora solo se permite el acceso para oración individual y confesión. Luego, de acuerdo con lo que disponga el Comité de Operaciones Emergentes (COE), se autorizará la comunión y finalmente la eucaristía.
Las misas serán a puerta cerrada, y la Arquidiócesis de Cuenca mantiene habilitadas plataformas digitales para que los fieles pueden seguir los cultos desde sus casas.
“Las celebraciones litúrgicas se cumplirán con normalidad, pero no así otras actividades como la feria de dulces que se desarrolla alrededor de esta fiesta religiosa…”, dijo.
Felipe Manosalvas es el titular de la Dirección de Areas Históricas y Patrimoniales, del Municipio de Cuenca, encargada de dar los permisos año a año para estos puestos de dulces.
Confirmó que no han emitido ninguna autorización en vista de que están prohibidos los eventos de concentración masiva de personas, como una medida para prevenir la propagación del Covid-19.
“Además hay que tomar en cuenta que el toque de queda es hasta las 21:00, y esta fiesta de corpus tiene una masiva presencia por las noches…”, manifestó.
Rosa Méndez, quien cada año por el Corpus Christi instala su puesto de venta de confites en la calle Luis Cordero, junto al parque Calderón, contó que este año recorrerá el centro histórico de la ciudad para vender.
Desde este fin de semana ella y sus dos hijas elaborarán quesadillas, alfajores, cocadas, huevos de faldiqueras, quesitos de leche, roscas, arepas y frutas confitadas.
Fanny Chávez, de la provincia de Manabí, que en los tres últimos años vino a Cuenca para comercializar sus caramelos y manjares de café y cacao en Corpus Christi, este año ya no lo hará.
Como una alternativa abrirá una fan page en Facebook para ofrecer sus productos al por mayor, pues necesita recuperar los cerca de 2.000 dólares que ha invertido en la preparación de estos. (CSM)-(I)
SAN BLAS
Diego Campoverde ofrece gran variedad de dulces: cocadas, manjares, dulce de leche, quesitos, suspiros, frutas confitadas, roscas enconfitadas, arepas, pan de viento; entre otros.
Su local está junto al parque San Blas, en el Centro Histórico, de Cuenca, y es una opción para degustar dulces típicos, ante la cancelación de la feria de golosinas del Corpus Christi.
El se prepara para esta festividad religiosa, pues estima que crecerá la demanda de estas golosinas, lo que asimismo significa una oportunidad para recuperar las ventas, que han caído por la emergencia sanitaria.
Quienes acudan a comprar deben usar mascarilla obligatoriamente como una medida de protección para evitar contagios de esta enfermedad, que afecta a nivel mundial.