Misión sanitaria concluye etapa en aislada reserva indígena de la Amazonía

Las Fuerzas Armadas de Brasil culminaron la primera etapa de la misión sanitaria en la recóndita localidad de Atalaia do Norte, en pleno corazón de la Amazonía, para auxiliar equipos locales en el combate al nuevo coronavirus SARS-CoV-2.

Según informaciones del Ejército entregadas a Efe, que acompañó la misión, la primera etapa terminó con 939 pacientes atendidos, 219 test rápidos realizados a personas con síntomas, diez intervenciones quirúrgicas y un traslado de una mujer hasta un centro urbano.

Las cirugías y el traslado fueron por casos ajenos a la COVID-19, pero se aprovechó la presencia del equipo médico militar para apoyar el trabajo que adelantan los profesionales locales, muchas veces en precarias condiciones y sin los equipamientos necesarios para algunos tipos de intervenciones, como la realizada a una líder indígena que necesitó ser operada de urgencia.

Otra mujer, diagnosticada con un embarazo ectópico y cuyo estado de salud se agravó, fue remitida en el avión militar del equipo médico hasta la ciudad de Tabatinga, en la frontera con Colombia y Perú, donde fue intervenida y recibió el tratamiento adecuado.

La misión sanitaria en la región, después de culminar esta fase, todavía continuará en los próximos días con el relevo de profesionales y el aprovisionamiento de insumos médicos, puntualizó a EFE uno de los militares responsables.

Atalaia do Norte, en el suroeste del estado del Amazonas y fronteriza con Perú, está situada en el Territorio Indígena del Vale do Javari, la segunda mayor reserva indígena de Brasil y donde vive el mayor número de pueblos originarios no contactados del mundo.

Pero el creciente aumento de contagios por coronavirus entre los indígenas, una de las poblaciones más vulnerables a la enfermedad, ha causado preocupación entre las autoridades, por lo que el Gobierno brasileño desplegó la pasada semana una misión sanitaria para proteger los cerca de 7.000 indios que residen en la región.

Los 23 profesionales que integran la misión distribuyeron en los centros médicos de Atalaia do Norte, de unos 20.000 habitantes, alrededor de 70.000 equipamientos de protección individual e insumos médicos, incluyendo ventiladores pulmonares, máscaras, guantes, alcohol en gel y test rápidos para detectar el nuevo coronavirus.

El último balance de la Secretaría Especial de Salud Indígena (Sesai), adscrita al Ministerio de Salud y que fue publicado el pasado sábado, indicaba que se han confirmado desde el inicio de la pandemia 4.185 casos de la COVID-19 en las comunidades y un total de 117 muertes.

El patógeno sigue en acelerada expansión en el gigante suramericano, que según el más reciente boletín del Ministerio de Salud, divulgado el domingo, suma 1.085.038 casos confirmados y 50.617 muertos, siendo el segundo país más afectado del mundo por número de contagios y decesos detrás de Estados Unidos. EFE