Aunque Iván Ontaneda, ministro de Comercio Exterior y Producción, aseguró que el pago anticipado del Impuesto a la Renta, que deberán realizar las empresas que hayan obtenido ganancias superiores a USD 5 millones durante el primer semestre del 2020, será destinado exclusivamente para ayudar a 125 mil microempresas afectadas por la pandemia de la Covid-19, los empresarios ni le creen esto, ni están de acuerdo con la anticipación del tributo.
Para Pablo Arosemena, presidente de la Cámara de Comercio, el cobro le quitará a las empresas lo más valioso que tienen en este momento de crisis: su liquidez, “con la que se mueve la cadena de pagos y se sostiene el empleo”.
Además, tampoco confían en el manejo correcto de los recursos, tomando en cuenta la gran cantidad de casos de corrupción recientemente denunciados en el sector público.
“El Estado es un pésimo administrador, nos va a quitar recursos con impuestos en plena crisis, supuestamente para devolverlos a las empresas. Esto afecta al empleo, es ineficiente y se presta para corrupción. El Gobierno debería enfocarse en controlar el despilfaro y la corrupción. Si no van a ayudar, al menos no compliquen más”, dijo Arosemena.
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Patricio Alarcón, expresidente del Comité Empresarial Ecuatoriano y actual presidente de la Cámara de Comercio de Quito, considera que la situación crítica que atraviesa el país no es momento para que se realice un pago anticipado de impuestos, pues aclaró que el que estas 1.180 empresas que deberán aportar hayan tenido ganancias, no necesariamente implica liquidez.
“No solo que el Gobierno no ha ayudado a los empresarios, si no que quiere empeorar un problema de caja a las pocas que obtuvieron utilidad. Esta decisión significa el retorno del anticipo al Impuesto a la Renta, contra el que tanto luchamos, porque perjudicaba a la liquidez tan necesaria para la sostenibilidad de los negocios y empleo”, puntualizó Alarcón.
Pablo Zambrano, presidente de la Cámara de Industrias y Producción, recalcó que las pérdidas que el sector productivo acumula hasta la fecha ascienden a USD 18.700 millones, por lo que recalcó que el Gobierno debería enfocarse en medidas en favor de la generación del consumo, en lugar de afectar a las pocas empresas que han generado ganancias y que son las que más empleo formal generan en el país. (ASM)-(I).
