Alarma en Chad tras detectarse más de 6.000 casos de chikunguña

Foto referencial de Fundación BBVA.

El Gobierno de Chad ha dado la voz de alarma tras detectarse más de 6.000 personas infectadas por el virus chikunguña en Abéché (este), la cuarta ciudad más grande del país, confirmó hoy a Efe el ministro chadiano de Sanidad, Abdoulaye Sabre.

El primer contagio de este virus, que se transmite a los humanos a través de picaduras de los mosquitos «Aedes aegypti» y «Aedes albopictus», fue un paciente de 64 años y se descubrió el pasado día 14.

Desde entonces, se han registrado 6.163 contagios en Abéché, capital de la región Ouaddaï, con algo más de 75.000 habitantes, donde cunde la preocupación.

Hasta ahora, el virus no ha causado ninguna muerte, pero las autoridades han manifestado su inquietud por este brote.

«Hemos puesto a todos los pacientes en tratamiento. Algunos se han recuperado, pero alrededor de 3.000 personas siguen en tratamiento», declaró Sabre.

«Estamos abrumados con una pequeña capacidad de recepción (de los enfermos). Requerimos a nuestros socios que nos ayuden. Lo hemos notificado oficialmente a la Organización Mundial de la Salud (OMS)», señaló el ministro.

Una misión ministerial partió de Yamena este viernes hacia Abéché con el fin de ofrecer la orientación necesaria para combatir esta epidemia.

«Después de la COVID-19, es una prueba más por la que estamos pasando aquí en Abéché. No sabemos qué hacer. Tenemos miedo de ir al mercado, miedo de ir a la mezquita ante la propagación de esta enfermedad», lamentó Adam Nassour, un vecino de la ciudad, en declaraciones a Efe.

Las recientes inundaciones en Abéché han provocado la propagación de los mosquitos, lo que «explica el resurgimiento de esta enfermedad» en la ciudad después de más de treinta baños sin casos, comentó a Efe el epidemiólogo Djiddi Ali Sougoudi.

El virus chikunguña, que no tiene vacuna, provoca fiebre, fatiga y dolor de cabeza y articulaciones, náuseas y erupciones cutáneas, síntomas que generalmente aparecen entre tres y siete días después de la picadura y pueden prolongarse por hasta tres semanas.

Este problema sanitario se suma a la pandemia de COVID-19, que en Chad ha causado, hasta la fecha, 1.004 contagios, 77 muertes y 875 curaciones, según los últimos datos oficiales. EFE