Delincuentes

Aurelio Maldonado Aguilar

OPINIÓN|

Tocamos fondo. Impensable, increíble los niveles de corrupción que existen en política, donde gestionan votos para salvar de juicios o situaciones comprometidas a jerarcas, que, sin vergüenza, manejan títeres dirimentes mediante dadivas y entregas de instituciones que se saben desde siempre, son de jugosas rapiñas. Ni la mente más afiebrada podría imaginar las formas camaleónicas que adquiere la podredumbre existente a todo nivel y que elegantemente llaman cuota política, termino inmoral y antiético pronunciado sin la menor vergüenza ni misterio, que incluso ven como normal en la conducta delincuencial de los políticos.

De cualquier manera, agradezcamos al gobierno actual, que, siendo parte de la trama mafiosa, dejó que justicia y fiscalía progresen, destapando día tras otro, escándalos de inmensa corrupción, anteriormente escondidos insolentemente creyendo que muchos ciudadanos de esta podrida patria, somos retardados mentales que, al grito de “tenemos carreteras” continuaríamos sin cuestionamientos. Agradezcamos que todo se aclare y a Lenín reconocerá la historia como presidente que devolvió libertad de prensa y expresión, desde donde salieron muchos timos, sentencias, condenas y prófugos. Cada Audiencia es mina de detalles, nombres y formas delincuenciales de obrar. Mendoza y su ayudante declaran que recibieron hospitales de manos de la ministra Romo y claro que los detalles concuerdan con sus juicios y salvatajes. Igual da montos y nombres de toda una recua de ladrones de la Asamblea, que recibieron cantidades concretas para votar por imposiciones gobernantes. Habla de Atamain en favores del CNE. Asegura Mendoza que la mina de oro que son comisiones de tránsito y demás entidades, fueron graciosamente entregadas por el ministro de transporte, el mismo que también está siendo investigado en el caso de fundas de cadáveres del IESS y otras cosas que vendrán por añadidura cuando cante Salcedo. La familia Bucaram, mimada por varios gobernantes, intervino décadas en nuestro sistema político con payasadas, procacidades, tarimas, desparpajo y desvergüenza, siendo ejemplo delincuencial heredado y aprendido. Se los ve entregando dinero por medicamentos y se escucha ofertas de sacarlos de la cárcel al israelita asesinado y el otro se salva de milagro. Ahora preso el gordito, jueces y autoridades reciben amenazas de muerte si no cumplen sus requerimientos. ¿Cómo salimos del agujero negro que nos carcome? ¿será cuestión de fomentar castigos enormes pero ejemplares para corruptos? (O)