Bares y discotecas buscan reactivarse

Una propuesta para la reapertura fue presentada al COE cantonal, pero aún no hay respuesta.

Algunos establecimientos cambiaron su modelo de negocio. XCA

Uno de los sectores que más se ha afectado económicamente a causa de la pandemia, es el que congrega a bares, restaurantes y discotecas, dado que todavía no se han podido reactivar, a fin de evitar aglomeraciones.

Según datos proporcionados por la Asociación de Bares, Restaurantes y de Entretenimiento Turístico y Cultural de Cuenca (ABRE), las pérdidas bordean el 50% a nivel de sector, sin embargo, para quienes se dedican exclusivamente a la venta de bebidas y a la administración de discotecas, la afectación es total.

Carlos Andrade, vicepresidente de ABRE, mencionó que en años anteriores, este gremio tenía ingresos que superaban los 140 millones de dólares, no obstante, este año se cerrará posiblemente con no más de 60 millones.

“Muchos bares y restaurantes tuvieron que cerrar sus puertas, en un 30% lo hicieron. Otros que constaban como bares tuvieron que cambiar su giro de negocio hacia restaurante para poder acoplarse al medio. Para los bares y discotecas que no han podido funcionar, la afectación es total, algunos continúan pagando rentas y las pérdidas son gigantescas”, refirió.

Andrade comentó que hace aproximadamente tres meses la asociación presentó un protocolo que fue aprobado por el Ministerio de Turismo para la reapertura de estos establecimientos bajo medidas de bioseguridad, pero de parte del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal, todavía no se ha emitido una respuesta.

“Estamos concientes de las formas en que se transmite el virus, pero tampoco se nos permite abrir los bares y discotecas con las medidas de bioseguridad, como lo han hecho otras ciudades a nivel nacional o regional”, agregó.

El protocolo presentado plantea la apertura de los establecimientos con un aforo limitado, de acuerdo a las capacidades de cada local. También, ciertos negocios tendrían que implementar medidas dentro de los establecimientos para el distanciamiento social.

“Se han incluido algunas cuestiones innovadoras como el separar las mesas mediante biombos o sistemas. Se incorporó sistemas de ventilación, también se hicieron llegar propuestas para destinar áreas exteriores, además de las otras medidas de bioseguridad que son temas industriales”, explicó Andrade.

Además, en este feriado, las cifras no han mejorado, aseguró, dado que los ingresos del feriado de octubre serían superiores.

“Estábamos preparados para recibir a un mayor número de visitantes, sobre todo de la Costa, pero es una pena. Estamos recolectando la data pero sabemos que es menor que el feriado del 9 de octubre”, sostuvo.

Restaurantes

La ABRE comprende a 45 socios entre bares, discotecas y restaurantes. De estos, los únicos que han podido reactivarse son los restaurantes, que en su mayoría han cambiado su modelo de negocio hacia el servicio de delivery, aunque tampoco existe un mejoría notable, agregó Andrade.

“Hay negocios que ya desde antes funcionaban con esa modalidad y han podido mantener el servicio, pero hay otros restaurantes que no tenían el servicio de entrega, se han visto muy afectados. No es que el servicio de delivery dio una solución (…) algo que también afecta a los negocios es la informalidad que ahora se ha triplicado. Cualquier persona natural, en este momento, ofrece servicio de alimentación a través de delivery”, indicó con preocupación.

Asimismo, para navidad la ABRE analiza alternativas que reactiven a estos establecimientos. Mientras, esperan que pronto se les permita volver a laborar. (LCH)-(I)