El agua en Wall Street

Andrés Martínez Moscoso @andresmartmos

El 2020 sigue con sorpresas alrededor del mundo, y esta vez la noticia fue que una práctica común en algunas regiones (negociar concesiones o derechos de uso de agua), ahora se formalizó cuando el agua ha sido tenida en cuenta en el mercado de futuros a través del índice Nasdaq Veles California Water (NQH2O).

Sin embargo, la noticia ha generado más dudas que certezas, e incluso ha generado posiciones contrapuestas, entre quienes lo consideran como un atentado contra el derecho humano al agua, versus otros que creen que la medida podría ayudar a generar un uso más eficiente del agua.

La escasez del agua se entiende como la falta de disponibilidad física del recurso, o en su defecto, la escasez debido a la falta de instituciones que garanticen su suministro. De tal suerte, alrededor del mundo más de 2 mil millones de personas atraviesan estrés hídrico (la demanda de agua es más alta que la cantidad disponible). Y es precisamente este factor, el que ha hecho que, en California, se establezca un mercado de futuros con relación al uso del agua para fines agrícolas e industriales.

Ahora bien, es preciso comprender que el régimen jurídico del agua en Estados Unidos de América, tiene sus propias particularidades, y ha estado asociado a la propiedad de la tierra; pasando de la tradición de derechos de agua ribereños, al flujo natural, hasta llegar a su rol en la energía hidráulica durante la revolución industrial.  No obstante, en el oeste americano (California incluida), entre 1870-1880 se desarrolló la doctrina de adjudicación por antigüedad (los antiguos tenían un derecho de uso de agua prioritario), derechos que al ser privados podían comprarse y venderse (fundamento de esta negociación de futuros).

Quienes critican la medida, consideran que existe una afectación directa al concepto de derecho humano al agua, así como a factores asociados como su importancia en el combate al COVID-19, así como peligro de especulación pese a ser un bien público.

No obstante, es importante aclarar que de momento el NQH2O sirve solo para California, y todavía no existen las condiciones para que se produzca un fenómeno similar en otras latitudes del mundo, sobre todo debido a una condición jurídica (el régimen del agua en la mayor parte de países occidentales difiere a la estadounidense narrada, y sus derechos y/o concesiones de uso no pueden ser negociados libremente). (O)