América Latina debe enfocarse en la transparencia e igualdad en la vacunación

Los países de América Latina y el Caribe tienen que centrarse en dar prioridad a los grupos de riesgo en la vacunación contra la covid-19 con acuerdos transparentes con las farmacéuticas, expuso este jueves Amnistía Internacional (AI) en un informe.

«Los estados de América Latina y el Caribe solo podrán vencer a la covid-19 si ponen a los derechos humanos como eje central de sus planes de vacunación. Esto requiere transparencia, cooperación y la difusión amplia de información», dijo a Efe la directora para las Américas de AI, Erika Guevara Rosas.

Para esto, concretó, es necesario proteger al personal sanitario y a los grupos de riesgo, a la vez que se impide la discriminación y la desigualdad y se garantiza el acceso gratuito a las vacunas a todas las personas, incluidos migrantes en cualquier situación.

«Los gobiernos deben destinar el máximo de los recursos disponibles a vacunar a sus poblaciones lo antes posible y abstenerse de utilizar las vacunas para beneficios personales y políticos», sentenció Guevara Rosas.

Con hallazgos, en general, bastante desalentadores, el informe «Vacunas en las Américas: 10 imperativos de derechos humanos» analiza los primeros pasos para lograr la inmunización de la población en 17 países de América Latina y el Caribe e incluye 10 recomendaciones dirigidas a Gobiernos y empresas.

OPACIDAD Y FALTA DE CAPACIDAD

El informe destaca que ningún país fue capaz de ofrecer a AI una copia de los contratos con las empresas farmacéuticas a pesar de que en muchos de los países analizados existen leyes sobre transparencia. «Hubo opacidad casi completa en los contratos con farmacéuticas», dijo a Efe Madeleine Penman, investigadora de AI.

La experta insistió en que la organización internacional también responsabiliza a las empresas, quienes «tienen que abrir su conocimiento científico para que la vacuna pueda producirse en todos los países del mundo sin demora». «Eso es un gran problema», dijo.

«Es lamentable que las negociaciones con farmacéuticas estén incitando a una carrera a la baja. Han hecho innovaciones muy importantes para la humanidad pero es el momento de compartirlas», sentenció.

Asimismo, ningún Gobierno fue capaz de responder a la pregunta de AI de si tenían o no medidas o protocolos sobre los pueblos indígenas dentro de sus planes de vacunación. Aunque algunos si los incluyen, no lograron responder con precisión.

Por otra parte, solamente 13 de los 17 países analizados han hecho públicos sus planes de vacunación. «Estamos a la espera de que algunos salgan de la opacidad y den una hoja de ruta clara porque, por ejemplo, en Ecuador, Venezuela o Nicaragua sigue sin responder», añadió la experta.

En cuanto a los sistemas de salud de los países de América Latina y el Caribe, el informe también recogió la falta de capacidad de los mismos a pesar de que los organismos internacionales consideran que la región no contiene «los países más pobres del mundo», sino que son considerados de «ingresos medios».

«Deberíamos tener un nivel de enfermeros, doctores, etcétera per cápita mucho más alto por el crecimiento económico que ha tenido la región pero el número es realmente lamentable. Por lo menos 10 de los 17 países ni siquiera tienen el nivel mínimo para proveer servicios básicos a la población», dijo Penman.

De acuerdo a las conclusiones del informe, los gobiernos no está logrando que la vacunación represente una oportunidad para que se reduzcan las desigualdades, sino todo lo contrario, se está aumentando la brecha.

«Tiene que ser un esfuerzo transparente, fiscalizado y colaborativo», mencionó la investigadora.

En este sentido, el informe también recuerda que 10 países de la región celebrarán elecciones próximamente y podrían «usar las vacunas con fines políticos».

CASOS CONCRETOS

México, por su parte, se encuentra en una compleja situación en cuanto a la vacunación de migrantes, pues el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró en varias ocasiones que se vacunará a todos los migrantes que se encuentran en el país pero hasta el momento «no está haciendo lo suficiente».

Otro caso que preocupa a AI es el de Brasil, un país que ha sido pionero y sólido en planes de vacunación anteriores pero ahora hay una «descoordinación alarmante» e incluso parte de la población negra tuvo que llegar a la Suprema Corte para ser incluidos en el plan, a pesar de ser uno de los países más sacudidos por la pandemia.

Sobre Colombia, el informe arrojó un poco de luz, ya que es el único que abrió su programa de vacunación a consulta, recibió más de 400 comentarios en pocos días y con eso fortaleció el plan. EFE