El voto nulo

Mónica Banegas Cedillo Twitter: @monicabanegasc

Encuestas públicas a la fecha sobre la obligatoriedad el voto, afirman que el 58% de los ecuatorianos no acudiría a las urnas si el voto no fuera obligatorio. Más de una vez en el país se ha puesto sobre debate la opción de cambiar a un régimen de voto facultativo, suponiendo que esto implicaría un mayor nivel de conocimiento del electorado ecuatoriano, que obligaría a las organizaciones políticas no solo a tener mejores ofertas de campaña, sino a  educar y motivar al ciudadano para que vote.El país no tiene un nivel de formación adecuado, esto significaría elitizar el voto.

El ciudadano tiene la libertad para no estar de acuerdo con ninguna opción para el balotaje del 11 de abril; sin embargo, en términos prácticos el voto nulo beneficiaría a quien tiene la mayor probabilidad de ganar. El art. 147 del Código de la Democracia, numeral 3 menciona que se declarará la nulidad de las elecciones cuando los votos nulos superen a los votos de la totalidad de los candidatos; situación imposible, al menos no se ha dado antes en el país. La mayoría de los ecuatorianos debería emitir un voto válido, caso contrario otros terminarán decidiendo por los proponentes del -famoso- voto nulo. (O)