Lasso propone el acceso directo a la universidad

Aún no se ha aclarado cómo se dará el acceso directo a las instituciones superiores. XCA

La eliminación de la Senescyt fue tema de campaña y el asunto se volvió a tocar cuando Guillermo Lasso fue electo presidente del Ecuador. Sin embargo, la tarde del pasado 15 de abril, Lasso dijo en un medio de comunicación guayaquileño que no se va a “eliminar la institución como tal”.

El presidente electo explicó que lo que se pretende es que los bachilleres ingresen directamente a las universidades.

“Lo que vamos a eliminar es ese requisito de que todo estudiante ecuatoriano pase por la Senescyt para ingresar a la universidad (…) Que ellos vayan directo a la universidad y no por la Senescyt”, puntualizó.

Pese a ello, aún no está claro cuál es el plan de Lasso al respecto. Y ante esa falta de claridad, cientos de comentarios y preguntas han surgido sobre cómo será el nuevo proceso para ser parte de la educación superior.

“Allí surge el gran desafío de responder a esta gran interrogante, ¿cómo entonces admitimos a los estudiantes a las universidades?”, preguntó Caroline Ávila, docente universitaria.

La Senescyt, además de preparar el EAES, se encarga del registro de títulos y de las becas a estudiantes. XCA

Sin un filtro se necesitarán miles de cupos para que todos los estudiantes puedan cursar una carrera universitaria, y esto se evidencia en los datos del año 2020. En el primer proceso de admisión, cuando todavía estaba vigente el Ser Bachiller, se inscribieron 293 025 personas para rendir el examen; sin embargo, solo había 109 368 cupos disponibles.   

En cambio, en el segundo proceso de admisión que se desarrolló entre agosto y diciembre del año pasado, cuando se eliminó el Ser Bachiller y se creó el Examen de Acceso a la Educación Superior (EAES), se inscribieron 188 945 personas, pero solo había 95 517 cupos en las universidades públicas. 

Más recursos

El presidente electo, Lasso, dijo que finalmente no se eliminará la Senescyt

Para el vicerrector académico de la Universidad de Cuenca, Juan Leonardo Espinoza, el problema medular radica en el número de cupos, ya que por más de que el examen sea acorde a lo que estudiaron los bachilleres o se lo elimine, sin la capacidad para recibir a más estudiantes no se resuelve la problemática del acceso a la educación superior.

“La realidad es que no hay la capacidad suficiente en las universidades públicas para recibir a todos los estudiantes. Hay una demanda insatisfecha, pero por más que perfeccionemos el sistema de admisión, siempre vamos a tener el problema de falta de cupos en la universidad”, subrayó Espinoza.

La Universidad de Cuenca ya informó de esta problemática al presidente electo Guillermo Lasso cuando hacía campaña en la ciudad, y también se explicó que sin recursos no podrá mejorar la educación.

“El presidente electo dijo que se iba a apoyar de las universidades para mejorar la educación superior, y nosotros le tomamos la palabra para avanzar”, dijo Espinoza. (AWM)-(I)