Por la transparencia

A veces convencidos de que en Cuenca el manejo del sector público, si se compara con el resto del país es siempre transparente, ciertas irregularidades pasan desapercibidas.

El Mercurio ha publicado el informe DPA-0024-2021 de la Contraloría. Se refiere a auditorías hechas a ETAPA EP, a la Prefectura del Azuay y a la Municipalidad de Cuenca.

En el caso de ETAPA EP, el examen apuntó al mantenimiento de la flota vehicular. Sobre la Prefectura, a la realización de la cumbre Hambre Cero, efectuada durante la administración del entonces prefecto Paúl Carrasco. Fue duramente cuestionada, tanto por los gastos ingentes, cuanto por inoportuna.

Sobre la Municipalidad, el examen se dirigió a la compra de amoniaco para desinfectar las calles de Cuenca, un procedimiento que, más allá de las buenas intenciones, luego se concluyó que era ineficaz.

La Contraloría concluye que, en los tres casos, los respectivos procesos se hicieron con documentos falsos.

Según el informe, en el caso de ETAPA EP se hicieron constar empresas que nunca presentaron sus proformas en los más de 60 procesos, supuestamente para favorecer a una sola. Están comprometidos recursos por cerca de USD 88 mil.

Sobre la compra de amonio, una empresa no tenía el RUC; y el permiso de funcionamiento de la ganadora presentó un permiso de funcionamiento de ARCSA falso. Aún así no cumplió con el contrato por USD 82.500. En un segundo proceso, el ganador presentó un informe de laboratorio que no contaba con permiso de ARCSA. Firmó por USD 49.850.

En cuanto a la cumbre, Contraloría descubrió documentos presuntamente falsos sobre dos contratos de comunicación, uno por USD 949.471, otro por USD 299.996.  Fueron recursos desviados del área social y sin la aprobación de la Cámara Provincial.

En los tres casos, llama la atención los justificativos dados por los responsables como pruebas de descargo. No dejan de ser hasta risibles.

Es de esperar que Contraloría establezca, si es del caso, las debidas responsabilidades. No hay que olvidar que la “La mujer del César no solo debe ser honesta, sino que además parecerlo”.