Dejar la Pandemia atrás

José Chalco Salgado josechalcosalgado@gmail.com

            Dejar la pandemia atrás no será sencillo. Aquella trajo dificultades, pérdidas, rupturas, vacíos y dolor. No será fácil, pero es necesario hacerlo ya.

            La historia de la humanidad no está acompañada exclusivamente por triunfos y victorias, también destacan los profundos obstáculos que -en su momento- parecían invencibles. Cuando el mundo clásico parecía hundirse sin tener espacio para el desarrollo, visión y posición ideológica de la humanidad, surgió el Feudalismo. Cuando este sistema, fue incapaz de procurar una respuesta a la realidad, las necesidades y preocupaciones de la época, surgió el Renacimiento. Cuando la II Guerra Mundial parecía poner fin a la humanidad, surgió la visión en respeto al ser humano y la profundidad por los derechos humanos. Cuando el Muro de Berlín parecía marcar un tiempo, una ideología y el pensamiento dual del Planeta, llegó la reflexión por la diversidad y complejidad social.

            El tiempo después de la COVID-19 tiene que enfrentar varios derroteros, pero lo principal será armonizar: la esperanza con la decisión y la intención con la valentía. Hay que reactivar al Ecuador y a su gente. Se debe pensar como un proceso hacia el progreso y reinvención del ser humano. Sí. Una apuesta contundente por la transformación.

Ya lo hemos hecho en otras ocasiones. No es únicamente un movimiento de reactivación económica y financiera, sino de estructuras y dimensiones. En aquel contexto, la educación será pieza estructural fundamental para mirar lo prioritario que permita pasar de una explicación clásica a una urgencia por lo sustantivo que incluye la explicación del ser humano, de la vida y el sentido de conservación y sostenibilidad.

            Hay que pensar creativamente en nuevas formas de asociación y producción. Los emprendimientos que miren a la conservación del ambiente y la vida; la consecución de objetivos -humanos y sensibles- sin hacer daño al otro. La urgencia por dejar la Pandemia atrás, pero también a lo gris y oscuro de la antigua sociedad. Es decir, la urgencia de un nuevo tiempo y comunidad. (O)