Especialistas sugieren analizar aguas residuales para detectar niveles de coronavirus

Analizar las aguas servidas de Cuenca una opción para determinar niveles de COVID-19.

En Cuenca se debe hacer un análisis del agua residual, que sale de las casas, para determinar niveles del virus SARS-CoV-2, que causa la COVID-19. Es una recomendación con la que concuerdan dos especialistas.

Uno de ellos es Juan Patiño, médico, laboratorista y exconsultor de la Asociación de Municipalidades del Ecuador (AME), quien indicó que en otras ciudades del Ecuador como Quito y Guayaquil ya se lo hace.

Patiño explicó que esto es fundamental para identificar y delimitar las zonas donde hay los mayores índices de esta enfermedad, y en base a esto decidir medidas a aplicarse para reducir el riesgo de más contagios.

De acuerdo con Patiño, este virus se elimina en las heces y orina, y estas generalmente van a las alcantarillas. Allí se pueden medir las cargas virales mediante copias por mililitro (mm) del líquido tomando como muestra.

“Las muestras pueden ser analizadas por laboratorios nacionales que tienen certificación o en algunos casos incluso se las puede enviar al exterior. Con esto tendríamos información muy valiosa…”, sostuvo.

Quito y Guayaquil

En Quito esto se hace por medio de un proyecto entre la Universidad Tecnológica Equinoccial (UTE), el Centro de Investigación Genética y Genómica (CIGG) y el Centro de Investigación en Salud Pública y Epidemiología Clínica (CISPEC).

Y colaboran el Municipio de Quito, por medio de su Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (EPMAPS); y la Unidad Técnica de Genética y Molecular (UTGM), del Hospital Carlos Andrade Marín (HCAM).

En Guayaquil en cambio lo hacen la Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (EMAPAG) con la Escuela Superior Politécnica del Litoral (ESPOL) y el laboratorio Biobot.

Maribel Mogrovejo, laboratorista e investigadora, aclaró que a pesar de que hay una posible transmisión fecal-oral de la COVID-19, esa no es suficiente evidencia de que el virus que se encuentre en las aguas servidas sea infeccioso.

Para Mogrovejo el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional incluso debe considerar a estas mediciones como una herramientas para tomar decisiones conjuntamente con los municipios.

“A nivel internacional inclusive se ha visto que este tipo de mediciones en las aguas servidas ha ayudado a predecir brotes de contagio para prevenirlos en la medida de lo posible o para estar preparados…”, señaló.

Y acotó: “en teoría podemos decir que este es un termómetro que se complementa con las pruebas de hisopado, los índices de fallecimientos y las atenciones en las casas de salud, para tener un panorama real de este virus…”. (CSM)-(I)

ETAPA EP

Josué Larriva, ingeniero de la Empresa de Telecomunicaciones, Agua Potable y Alcantarillado (ETAPA EP), del Municipio de Cuenca, es el encargado de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) de Ucubamba.

Hasta este lugar llega por lo menos el 95% de las aguas servidas que se generan en la ciudad, y allí pasan por un proceso de limpieza para ser devueltas al río en buenas condiciones.

Larriva explicó que las muestras para detectar el virus SARS-CoV-2, que causa la COVID-19, se deben tomar en los diferentes sectores de la ciudad donde se producen y no necesariamente en la PTAR.

Indicó que en estas instalaciones no se han reportado contagios del personal por COVID.19, por lo que se cree que de haber virus en las aguas que allí llegan la carga viral es baja.

En caso de que se resuelva hacer este tipo de monitoreo de COVID-19 en Cuenca las muestran deberían ser enviadas a un laboratorio externo, puesto que ETAPA EP aún no tiene la certificación para este tipo de análisis.