El Fútbol, agente contra violencia de género en comunidades en riesgo social

San José (EFE).- Además de ser el deporte más popular del mundo, el fútbol puede convertirse en un agente de cambio para luchar contra el flagelo de la violencia hacia las mujeres, como lo demuestra un programa que la Fundación GOLEES está ejecutando en comunidades en riesgo social de Costa Rica.

Una idea que comenzó como una tesis universitaria de Educación Social en 2019 se convirtió en una fundación que busca ayudar a niñas y mujeres a hacer frente y superar la violencia de género a través del fútbol, explicó a Efe Carme Selleras, una española exjugadora del Atlético de Madrid, quien creó la fundación.

Selleras comentó que GOLEES son las siglas para Género, Orgullo, Libertad y Empoderamiento de Ellas en la Sociedad y que en la actualidad trabaja con niñas y mujeres de La Carpio, una comunidad de San José con alta vulnerabilidad social, y que está comenzando con comunidades indígenas.

«El fútbol es una herramienta de transformación social y para erradicar la violencia de género. La idea nace a mediados de 2019 para mi tesis sobre el empoderamiento de las mujeres a través del fútbol. Lo que iba a ser un proyecto de 4 meses en La Carpio fue un éxito y se constituyó en la Fundación GOLEES», comentó Selleras.

 El programa abarca el deporte por medio de entrenamientos y partidos que fomentan el trabajo en equipo, la actividad física, la disciplina, los valores y la diversión, y además el eje psicosocial mediante talleres grupales con el objetivo de crear un espacio de confianza y apoyo mutuo para debatir sobre los derechos de las mujeres.

En las actividades participan niñas y mujeres de todas las edades que sienten el campo de fútbol como un espacio libre y seguro.

«El fútbol es un lenguaje universal para crear espacios libre y seguros para niñas y mujeres, que ellas como agentes de cambio repliquen estos espacios en sus casas, trabajos, centros educativos y en las calles. El 1 % de lo que hacemos es fútbol y el 99 % es trabajar temas de violencia de género, trata de personas, y otros problemas sociales», declaró Selleras.

Selleras explicó que las protagonistas de la iniciativa son las niñas y las mujeres, pero de manera secundaria la Fundación también realiza trabajos en el entorno social de ellas con niños y hombres.

La actividad más reciente de la Fundación GOLEES se llevó a cabo en la comunidad indígena Tainy,de la etnia cabécar, situada en la provincia de Limón (Caribe), donde unas 60 niñas y mujeres disputaron partidos de fútbol descalzas.

«Vimos mucha calidad futbolística y muchas ganas de la comunidad por hacer algo que beneficie a las niñas en sus derechos», resaltó Selleras.

La actividad fue apoyada por Stephannie Blanco, una futbolista indígena costarricense que el año pasado fue fichada por el Deportivo La Coruña de España.

Para la directora de la Fundación, Costa Rica es un país con muchos avances en la lucha contra la violencia de género, pero lamentó que muchas veces esos avances no se ven reflejados en las comunidades en riesgo social, y puso como un ejemplo el embarazo adolescente que sigue siendo común en esas zonas.

El sueño de Selleras es llevar la metodología del fútbol como herramienta contra la violencia de género por toda Latinoamérica y el Caribe, algo que espera comenzar a concretar el próximo año con un proyecto llamado «Un balón como equipaje».

Selleras planea tomar una balón y una mochila y comenzar a recorrer el continente para llevar el mensaje a comunidades en riesgo social de que el fútbol le puede cambiar la vida a la gente.

La idea es desplazarse por 27 meses a lo largo de América y el Caribe y producir un documental e incluso una miniserie con las experiencias que vaya acumulando acerca del fútbol como agente de cambio social.

«Si las mujeres avanzamos en fútbol, avanzamos en una sociedad más justa e igualitaria», expresó. EFE