No videntes necesitan de la enseñanza presencial para desarrollar el sentido del tacto

: Las personas no videntes requieren del desarrollo del tacto para desenvolverse de mejor manera. Andrés Mazza/El Mercurio

Soledad Monsalve tiene 77 años, y desde hace seis asiste a la Unidad Educativa Especial de No Videntes de Cuenca. Si bien ya ha aprendido lo básico para desenvolverse sin sus ojos, cada año ha formado parte de la institución que ayuda a jóvenes y adultos que tienen discapacidad visual porque la considera su casa.

Pero una vez que la pandemia llegó a Ecuador, y las actividades presenciales pasaron a ser virtuales, su vida, como la de muchos, cambió. Lo que solía hacer en las clases tuvo que hacerlas a través de una pantalla. Y para ella, ese trabajo, el compartir, el aprender, se volvió complejo.

En el tiempo que estuvo bajo la virtualidad se preguntó: si ella, que tenía cierta noción, ciertos conocimientos y ciertas aptitudes se le complicaba desenvolverse, qué pasaba con quienes habían perdido la vista o la estaban perdiendo, y necesitaban ayuda.

La misma pregunta se hizo Azucena Paguay, docente de la Unidad Educativa Especial de No Videntes, quien, obligada por la emergencia sanitaria, tuvo que enseñar lo poco que se podía mediante las plataformas virtuales.

“El problema es que hay ciertas cosas teóricas que se puede indicar. Para quienes ya tienen más experiencia, el trabajo no era tan complicado, sin embargo, la tecnología sí fue un problema porque no todos saben manejar, mucho menos en nuestras condiciones”, dijo Azucena.

La enseñanza virtual no es la mejor herramienta para ayudar a las personas con discapacidad visual. Andrés Mazza/El Mercurio

Enseñar el braille, enseñar las matemáticas con el ábaco y enseñar a manejar el bastón requiere del tacto, un sentido que se vuelve primordial cuando se pierde la vista. Y con la virtualidad, es poco o nada lo que se pudo hacer para desarrollar esa sensibilidad.

Actividades presenciales

Con conocimiento de causa, Azucena ha emprendido la tarea de que los jóvenes y adultos regresen a la única aula que tiene la Unidad Educativa Especial de No Videntes para que aprendan a desenvolverse a través de diferentes talleres. Y para ello empezó a receptar matrículas de quienes tengan 15 años o más.

“Necesitamos de esa presencialidad, queremos enseñar, queremos ayudar. Hay jóvenes y adultos que lo necesitan. Nosotros nos estamos organizando para recibirlos de nuevo”, dijo Paguay.

Azucena Paguay espera que la institución pueda contar con un espacio más grande para recibir a los estudiantes. Andrés Mazza/El Mercurio

Por el momento, el establecimiento educativo en donde, además de Azucena, trabaja Rafael Auquilla, el reconocido músico vidente cuencano, cuenta con ocho personas inscritas, quienes recibirán clases en distintos horarios porque, en las condiciones pandémicas actuales, es imposible trabajar en el espacio pequeño que tiene la institución.

“Nos han cambiado de lugares. Ahora estamos en un lugar pequeñito. Lo que nosotros hemos pedido es que nos ayuden, que nos den un lugar acorde a las necesidades de las personas no videntes. Necesitamos algo mejor. Estamos esperando eso”, dijo Soledad Monsalve.

Azucena ya solicitó al Ministerio de Educación, a través de un oficio, que se dé la posibilidad de cambiar del lugar, ya que no se puede recibir a más de dos estudiantes en el espacio que ellos tienen.

Por su parte, desde el área técnica de la coordinación zonal 6 del Ministerio de Educación informaron que se ubicó una institución disponible para el traslado. Se prevé que la próxima semana se cumpla con ello. (I)

DATOS

  • Ser parte de la Unidad de Educación Especial de No Videntes no tiene ningún costo, sin embargo los aspirantes deben tener más de 15 años.
  • Para matricularse y formar parte de los talleres, los interesados deben enviar una copia de su cédula y del carné de discapacidad.
  • Quienes sean parte de la institución accederán a talleres de braille, matemáticas, orientación y movilidad, y computación.
  • Cada uno de los talleres se llevarán a cabo a lo largo del año lectivo 2021-2022 del régimen Sierra y Amazonía.
  • Las capacitaciones se realizarán en la institución que, por el momento, está ubicada en las calles Pedro Vicente Maldonado y Manuela Sáenz.