Manifestantes en Varsovia aluden a «guerra» por situación en la frontera

Manifestantes en Varsovia. Foto: Notiamérica

Los organizadores de una concentración por el Día de la Independencia de Polonia aseguraron este jueves que el país vive una situación de «guerra» por la tensión en la frontera con Bielorrusia, desde donde intentan acceder a territorio de la Unión Europea (UE).

Miles de personas acudieron este mediodía en la céntrica plaza Dmowski de la capital polaca antes de iniciar la Marcha del Día de la Independencia, en la que se prevé una fuerte presencia de movimientos de ultraderecha, que en años anteriores protagonizaron enfrentamientos con la policía.

En una alocución, los organizadores aludieron a la situación de «guerra» que según ellos vive Polonia «con Moscú atacando nuestra frontera, la Unión Europea atacando nuestra independencia» y «los medios de comunicación atacándonos con mentiras».

La concentración previa a la marcha se celebró en una zona que se encuentra en obras, y las vallas, socavones y maquinaria dificultaron la afluencia de los asistentes.

La edición de este año está marcada por la tensa situación que se vive en la frontera con Bielorrusia, en el este del país, donde hay desplegados miles de soldados para impedir la entrada de inmigrantes irregulares llegados a ese país desde Irak, Siria y Afganistán, principalmente.

Entre los asistentes a la concentración había representaciones de grupos nacionalistas de otros países, como España y Hungría, y se podían ver numerosas banderas de la organización nacionalista polaca ONR (Campo Nacional Radical), que en su manifiesto aboga por «una Polonia étnicamente homogénea».

Ante la posibilidad de incidentes violentos provocados por elementos ultras, el alcalde de la ciudad, Rafał Trzaskowski, solicitó la semana pasada que se suspendiese la marcha, pero el gobierno autorizó que la marcha tuviese carácter estatal, lo que permitió que finalmente tenga lugar.

En ediciones pasadas se registraron numerosos disturbios y se exhibieron pancartas con lemas racistas y simbolos fascistas.

Tanto el presidente polaco, Andrzej Duda, como el primer ministro, Mateusz Morawiecki, que participaron en otros actos oficiales organizados con motivo del Día de la Independencia, anunciaron que no acudirán a la marcha. EFE