Presea Vicente Rocafuerte

Francisco Chérrez Tamayo

Esta es una de las máximas distinciones que otorga la asamblea nacional, a quién (es) se destaquen en el ámbito científico, cultural, social o deportivo. En esta ocasión, y en uno de sus exiguos aciertos, la Asamblea acaba de entregar esta distinción a un preclaro y valioso caballero, el Ing. Bolívar Sarmiento Regalado; ya era tiempo de este homenaje justo y merecido. Hablar de este grandioso músico y, sobre todo, maravilloso ser humano, es hablar de un artista por antonomasia, que genéticamente lleva su arte y su destreza musical, en la sangre y en el corazón; producto de la herencia de su padre, el maestro Víctor Sarmiento quién, le regaló a Bolívar su primera guitarra a los 3 años de edad, cuando era muy niño.

A más de sus enseñanzas musicales, Bolívar recuerda con devoción los consejos de su padre: “Aprende primero a ser persona, luego a ser artista”, “El incentivo del artista no es el alcohol, ni el cigarrillo, sino el cariño de las personas que te rodean”. A los 7 años, ya era un virtuoso guitarrista; luego su fama trascendió  a nivel nacional e internacional, poniendo muy en alto el nombre de nuestra Nación. Australia, Francia, y todas las ciudades del Ecuador, nos darán la razón.  Como profesor del Conservatorio “José María Rodríguez” de Cuenca, fue formador de muchos jóvenes talentos musicales; formó parte de varios grupos artísticos, como el “Quinteto del recuerdo”, grupo “Antares”, trío “Época”, el “Quinteto polifónico” de la Municipalidad de Cuenca, etc. etc. 

Bolívar es un ser humano imponderable que, teniendo el talento de los iluminados, mantiene la sencillez y la modestia de los humildes. Nos sentimos orgullosos y satisfechos por el logro de este gran amigo; es un verdadero honor para la Ciudad y el País, contar con estos personajes, que al menos momentáneamente nos hacen olvidar de las plagas que soportamos, como son la pandemia y la corrupción. Esperamos que las autoridades regentes del cantón y de la Provincia,  sobre todo las de cultura, se hagan presentes al respecto, porque mucho nos quedan debiendo. Con estas buenas noticias, les auguramos un Feliz Año Nuevo, estimados lectores. (O)