Incertidumbre política sigue en Perú en medio de críticas a nuevos ministros

La tensión e incertidumbre política se mantienen en Perú, a la espera de conocer una posición mayoritaria del Congreso sobre el nuevo gabinete de ministros del Gobierno de Pedro Castillo, sumido en una grave crisis que ahora tiene en el punto de mira al flamante titular de Salud.

Con la designación del nuevo equipo ministerial liderado por el abogado Aníbal Torres, Castillo intentó el martes apagar el incendio que había prendido el nombramiento del exprimer ministro Héctor Valer, quien renunció el último viernes, apenas cuatro días después de asumir el cargo.

El mandatario había prometido esta vez un gabinete “más participativo y de ancha base”, pero acabó conformándolo bajo el criterio de reparto de cuotas de poder para intentar evitar su destitución y allanar el camino para lograr el voto de confianza en el Congreso, donde domina la oposición y cada vez crecen más los pedidos a favor de su renuncia.

Así lo aseguraron a Efe los politólogos Adriana Urrutia y Mauricio Zavaleta, quienes coincidieron en que la composición del nuevo gabinete, el cuarto desde que Castillo asumió el poder en julio del año pasado, parece responder más a “intereses particulares y políticos” que a “una cuestión de proyecto”.

Sobre esto también se pronunció este jueves la Cámara de Comercio de Lima, que cuestionó que Castillo haya privilegiado “el pago de favores políticos” y haya designado como ministros a personas sobre quienes pesan acusaciones de corrupción, violencia física y psicológica contra su entorno familiar, así como graves faltas a la ética profesional.

CRISIS EN EL SECTOR SALUD

El nuevo ministro de Salud, Hernán Condori, es sin duda la figura más cuestionada por su ejercicio de la medicina y su promoción de productos farmacéuticos sin ningún respaldo científico, como el agua arracimada.

El nombramiento de Condori, en plena tercera ola de contagios, sorprendió por reemplazar a Hernando Cevallos, quien fue uno de los integrantes del Ejecutivo más respetado por liderar la exitosa campaña de vacunación contra el coronavirus.

Desde que asumió, políticos, científicos, la Defensoría del Pueblo y hasta el Colegio Médico del Perú exigieron su renuncia inmediata al considerar que no tiene las competencias “mínimas” para el cargo.

Y este jueves la polémica se sintió en su propio despacho con la renuncia del viceministro de Salud Pública, Gustavo Rosell, y de los cinco integrantes del Equipo Consultivo de Alto Nivel del Ministerio de Salud.

Además, el Partido Morado, que hasta hace poco apoyaba al régimen de Castillo, presentó una moción para citar a Condori al pleno del Congreso para aclarar estos cuestionamientos, sobre los cuales ni el mandatario ni Torres se pronunciaron.

“Ya el presidente está estudiando ese caso”, se limitó a decir el primer ministro.

Quien sí salió a defender la designación de Condori fue el partido oficialista Perú Libre, que en un pronunciamiento aseguró que el ministro “viene siendo atacado mediáticamente de forma escandalosa” por un sector de la derecha política.

¿Y LAS MUJERES?

Otro punto débil del nuevo gabinete es su falta de paridad. En ese cuarto intento, Castillo nombró apenas a tres mujeres para liderar las carteras de Trabajo y Promoción del Empleo; Mujer y Poblaciones Vulnerables; y Desarrollo e Inclusión Social.

“La paridad no es una prioridad para ese gobierno y hemos retrocedido más bien en la retribución de derechos políticos a las mujeres”, comentó Urrutia.

Más allá de eso, agregó, el mandatario también “ha nombrado a personas que atentan claramente contra los derechos de las mujeres”, como fue el caso del exprimer ministro Valer, quien cayó presionado por las presuntas denuncias por violencia familiar, o los actuales ministros de Defensa y Transporte, quienes también fueron denunciados por ese delito, según reveló la prensa local.

En su primera rueda de prensa como presidente del Consejo de Ministros, Torres anunció el miércoles que solicitará a los integrantes de su gabinete que presenten un informe para conocer si tienen antecedentes de denuncias de violencia a la mujer.

Torres insistió, además, en que el Gobierno de Castillo tiene una política económica “bien clara” que es “de libre mercado, pero con la participación del Estado para controlar los monopolios, los oligopolios y las posesiones dominantes”.

Ese mensaje fue bien recibido por los inversionistas este jueves, cuando el dólar cerró negociado a 3,74 soles en el mercado interbancario, un valor que no se registraba desde mayo de 2021, antes de que llegara Castillo al poder. EFE