Qué agita el gallinero

Carlos Castro Riera

Se vive una fuerte agitación política con enfrentamientos por captar la presidencia en el Consejo de la Judicatura y el Consejo de Participación Ciudadana, anuncio de consulta popular para reformar la justicia, división de bancadas legislativas y agrupaciones políticas, conformación de una nueva mayoría parlamentaria entre PSC, UNES y una fracción de Pachakutik, fiscalizaciones y juicios políticos a la carta, lluvia de medidas cautelares y acciones de protección, reinicio de investigaciones penales al ex gobierno de Moreno, paralización del concurso de Contralor General del Estado y de la renovación parcial del Consejo Nacional Electoral (CNE).

Detrás de estas pugnas políticas está la disputa por controlar el aparato de justicia en el ámbito administrativo y jurisdiccional, así como también la Contraloría General del Estado para legitimar la impunidad en unos casos o para intimidar o perseguir en otros, dependiendo de la relación o conducta de los supuestos involucrados con el poder político como sucedió en el pasado, y en el caso del CNE está en juego su control en vista de las próximas elecciones y de la posible consulta popular…

Ahora cuando se anuncian grandes negocios con el patrimonio publico a través de ventas, subastas, privatizaciones o monetizaciones de activos o empresas como la CNT, Banco del Pacifico, Centrales Hidroeléctricas, o de nuevos contratos petroleros y mineros, regularización de activos del exterior, incentivos tributarios, alianzas público privadas, concesiones de carreteras y puertos, entonces se pone en la mira la subordinación al poder político de los organismos del control.

Por otro lado, las expectativas de negocios e inversiones con la apertura privatizadora cobran más impulso cuando el precio referencial del barril de petróleo rebasa ya los noventa dólares y con perspectivas de seguir subiendo por la situación política internacional, todo lo cual exacerba las disputas entre las diversas fracciones del bloque en el poder y sus representaciones políticas, sobre el destino de las rentas petroleras extras.

A este escenario económico se suman los grandes juicios por corrupción lo que hace de las entidades de control, un objetivo del campo de batalla política. He allí porque se agita el gallinero. (O)