Mujer

María Eugenia Moscoso C.

                                                        “Yo viví sesenta años en un día  

                                                           Y en una hora de amor

                                                           Sesenta eternidades”. Hombre Planetario, J. Carrera A.

En estos versos del gran Jorge Carrera Andrade, se consigna la más elevada expresión de la mujer, en su enorme capacidad de acción y de entrega.

Cada 8 de marzo, la sociedad universal celebra el día de la mujer; desde algunas decenas de años atrás, la mujer captó la atención de gobiernos e instituciones. ¿Por qué la mujer? No hay duda que ella es el centro del hogar, de la vida en familia y de la sociedad. La mujer es el eje del trabajo; en torno a ella se generan acciones y resultados en la casa, frente a un escritorio o en la vida en el campo. Su vida es producción y desde su matriz, se genera la vida.

Por ello, desde el S. XIX se pensó que la figura de la mujer sería la que dé lugar a una festividad especial, que luego se entronizó a lo largo y ancho del mundo, a fin de exaltar su personalidad. ¡Bien por la mujer y bien por la sociedad! Ella deja una onda abierta para pensar que la mujer activa puede acceder a los más elevados espacios de la vida humana.

Hoy, cuando la guerra se ha entronizado en Ucrania, resulta tremendamente doloroso contemplar la huida de las mujeres con sus hijos abandonando casas, trabajos, estudios, pues las balas se ciernen por doquier.

Es hora de elevar una plegaria por las mujeres que, embarazadas en muchos casos, han debido dar a luz a sus hijos en cualquier momento y en cualquier lugar. Que la gran potencia suavice sus acciones y que la bandera de la paz, cubra a Ucrania y a los pueblos colindantes. (O)